Don Juan Carlos toca fondo y provoca un nuevo terremoto en Zarzuela
La investigación abierta por la Justicia en Suiza amenaza con derruir del todo la maltrecha imagen del Rey emérito, aunque en España ni judicial ni parlamentariamente tenga recorrido.
A Felipe VI se le llenó este lunes Zarzuela de escolares de toda España. Como tantas veces hiciera su padre, Don Felipe recibió a los ganadores del concurso ¿Qué es un Rey para ti? en un ambiente distendido e inocente.
Los niños le enseñaron los dibujos al Monarca y él no dejó de sonreír. Fue una balsa de aceite en mitad de la nueva tormenta que arrecia en Palacio; una más después de haber sobrevivido a las andanzas de Iñaki Urdangarin y a una abdicación.
Las investigaciones judiciales en torno a una supuesta cuenta de Don Juan Carlos en Suiza, presuntamente vinculada al cobro de comisiones por la adjudicación del AVE a La Meca a un consorcio español en el año 2008, han provocado una honda preocupación en la Casa Real.
Allí creen que está en juego no solo la maltrecha imagen del Rey emérito, que está para menos trotes que su salud incluso, sino sobre todo la imagen de la Institución. Que es lo que verdaderamente preocupa a Don Felipe y Doña Letizia.
Tanto la Fiscalía de Suiza como la Fiscalía Anticorrupción española investigan un rastro de dinero que conduce, supuestamente, al que fuera jefe del Estado español durante casi cuatro décadas.
Según publicó días atrás la Tribuna de Ginebra, Juan Carlos I habría recibido 100 millones de euros del Rey de Arabia Saudí, Abdullah bin Adbul Aziz Al Saud, en una cuenta a nombre de la Fundación Lucum. Durante años, y siempre según el mismo diario, sacó dinero de forma regular y en 2012 transfirió lo que quedaba, 65 millones de euros, a Corinna Larsen.
En paralelo, la investigación suiza ha desempolvado en la Audiencia Nacional la llamada pieza Carol, vinculada a las conversaciones que el comisario Villarejo grabó a la examante del Rey y en las que ésta aseguraba que Don Juan Carlos había cobrado 100 millones de euros en comisiones por el AVE a La Meca.
Aunque la causa fue archivada, si Anticorrupción toma la iniciativa puede que acabe reabriéndose. Entretanto, y para agitar más el avispero, Corinna ha adelantado que piensa denunciar en Londres al padre de Felipe VI por las amenazas y presiones recibidas para que calle. Según ella, del que fuera director del CNI, Félix Sanz Roldán.
Y está, por último, la comisión de investigación que Unidas Podemos ha pedido crear en el Congreso para aclarar los negocios del monarca emérito.
Desde el entorno de Don Juan Carlos repiten que jamás cobró una comisión, sino que el dinero fue un regalo del monarca de Arabia Saudí. Es decir, reconocen implícitamente que existió tal dinero y de quién venía, otra cosa es si fue una comisión o un presente de un amigo extremadamente generoso.
Parlamentariamente el asunto tiene poco recorrido, en tanto que el PSOE se escuda en la inviolabilidad del Rey durante aquellos años (recogida en la Constitución) para no dejar que esa comisión pase siquiera de la Mesa del Congreso. Y judicialmente tampoco: el monarca emérito no aparecerá nunca en ningún papel.
Sin embargo, éste puede ser el golpe de gracia a Don Juan Carlos, ya retirado de la vida pública (desde junio de 2019) y dedicado a placeres mundanos y a cuidar su salud.