Cerrar

Sánchez fracasa en su intento de culpar a Casado y recurre a Twitter desesperado

La primera sesión de control al Gobierno en el Congreso del estado de alarma fue bronca pero clarividente: no habrá Pactos de la Moncloa, el presidente es el primero que no los quiere.

Sánchez durante la sesión de control.

Publicado por
A.I.M.

Creado:

Actualizado:

Cinco semanas después de que el Congreso suspendiera su actividad ordinaria, incluidas las sesiones del control al Gobierno, este miércoles la Cámara Baja levantó el cerrojo después de no poca presión por parte de la oposición.

Y lo hizo con una sesión de control al Ejecutivo bronca en medio del estado de alarma y con más de 18.000 muertos.

Dos cosas quedaron claras en un hemiciclo nuevamente semivacío. La primera, que la estrategia de Pedro Sánchez de reclamar a la oposición -y sobre todo al PP- "lealtad" y unos Pactos de la Moncloa de los que hasta la fecha nada ha concretado es compartida con Pablo Iglesias.

El vicepresidente segundo actuó de caja de resonancia de su socio y pidió a los populares que vuelvan "a la Constitución y al patriotismo". Por si quedaba alguna duda de que lo último que pretende Sánchez es romper su Gobierno con Iglesias para pactar con Casado.

Y la segunda es que nadie apuesta por unos Pactos de la Moncloa, ni siquiera el propio presidente, que aprovechó la sesión en el Congreso para seguir fabricando ese relato de que el PP es el culpable. Aunque sigue sin salirle bien. De hecho socialistas y morados incluso recurrieron a Twitter, desesperados, y lanzaron el hashtag #unaoposiciónindecente cuando la sesión estaba en marcha.

Aquí un tuit de Gerardo Pisarello, miembro de la Mesa del Congreso además (en concreto secretario primero):

Sánchez volvió a hacer un llamamiento a la "unidad" sin decir para qué y el líder de la oposición le respondió que si realmente quiere pactos lo mejor es abordarlos "con luz y taquígrafos" en el Congreso, en el marco de las comisiones y subcomisiones ya creadas en el Congreso(como la de Presupuestos y la del Pacto de Toledo) y de la Conferencia de Presidentes.

Por su parte Vox siguió ajeno a cualquier oferta de diálogo y por contra le reprochó a Iglesias, por boca de la diputada Macarena Olona, que el Gobierno de coalición esté aprovechando esta crisis para imponer su modelo, "el totalitario y comunista de Venezuela". El vicepresidente segundo ni le contestó.