Revilla saca a la luz el otro "pacto sibilino" entre Sánchez y Bildu y enfurece
"De rondón". El presidente de Cantabria alerta del otro acuerdo que se esconde en el pacto del Gobierno con los batasunos. Y que le toca el bolsillo a todos los españoles.
El pacto entre el PSOE, Podemos y Bildu sigue 48 horas trayendo cola y generando ríos de tinta. Al aluvión de críticas se ha sumado este viernes el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, que ha ido más allá del polémico acuerdo para la derogación de la reforma laboral. Revilla destapa el otro "pacto sibilino" entre Pedro Sánchez y Arnaldo Otegi, colado en la negociación "de rondón".
Revilla ha denunciado este "otro acuerdo todavía más sibilino y denunciable" entre el Gobierno de España y los proetarras que, según él, "añade gravedad" a la polémica, y es que se exime a País Vasco y Navarra del techo de gasto y de la inmovilización de los recursos de los ayuntamientos, lo que supone un "trato discriminatorio" respecto a las comunidades autónomas y municipios del resto del país.
"Esto no es presentable. Yo espero que en las próximas horas haya una rectificación contundente y se anule ese acuerdo", ha advertido el líder del PRC a preguntas de los periodistas sobre el pacto y si el mismo afectaría al acuerdo de gobierno con el PSOE en la Cantabria, donde ambos partidos gobiernan en coalición.
Revilla se ha quejado de este acuerdo que "nadie conocía" y que ha trascendido "a posteriori" pues se ha introducido "bajo cuerda" y "de rondón, al final" del pacto para derogar la reforma laboral. Considera que es "de tal calado" que "añade gravedad al asunto", pues permite a dos comunidades endeudarse y disponer del superávit de sus ayuntamientos, que en Cantabria asciende a 450 millones de euros y en toda España a 10.000 millones.
"Me parece esto mucho más graves que lo otro y desde luego mucho más denunciable", ha clamado enfurecido Revilla, para quien "lo de la reforma laboral es un tema casi hasta menor" y más si se tiene que ha habido "rápidamente una rectificación".
"Es un puro disparate en estos momentos en los que tenemos que animar a las empresas a que contraten personal, no ponerlas trabas o preocuparlas con normativas que, algunas, habrá que ir modificando poco a poco", ha sentenciado el mandatario cántabro, para quien dicha derogación es "improcedente" y, "en este momento, lo más inoportuno que se puede hacer".
Para concluir, Revilla ha avanzado que el domingo, en la conferencia de presidentes autonómicos, expondrá su queja al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. "Voy a protestar por estos acuerdos que se han hecho sin que se conozcan" y por los que se conceden "unos réditos" a unos partidos que en el conjunto de España son "absolutamente negativos" al tiempo que suponen "excepciones dentro del territorio". "Para unos sí y para otros no", ha denunciado.