El hijo diplomático de Borrell asciende: Exteriores le envía de Panamá a la ONU
Joan Borrell Mayeur fue el primero en su promoción en 2010. En el reajuste general impulsado por González Laya en el segundo escalón ha encontrado acomodo en uno de los destinos vip.
El diplomático Joan Borrell Mayeur, hijo del exministro de Exteriores.
La ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, ha decidido girar el bombo de las embajadas. Y como suele suceder en estos casos, a unos pocos diplomáticos les ha tocado el gordo, a otros las pedreas, y a algunos, directamente, les tocará esperar a nuevos sorteos.
El Boletín Oficial del Estado publica este miércoles varios nombramientos de los segundos escalones en distintas embajadas, con los movimientos más importantes en las legaciones de España en Venezuela, Estados Unidos y Cuba. Pero en el BOE un nombre sobresale entre todos, el del diplomático Joan Borrell Mayeur, hijo del exministro y actual responsable de la Diplomacia Europea, Josep Borrell.
Borrell Mayeur, que fue el primero en su promoción en 2010 en la Escuela Diplomática, ocupaba hasta ahora la Segunda Jefatura de la embajada en Panamá, en la que se ocupaba además de los Asuntos Culturales. La ministra González Laya, que sustituyó a su padre, le envía ahora como secretario de embajada en la Misión de España ante Naciones Unidas. Uno de los destinos más codiciados en la carrera.
Borrell Mayeur ha ocupado todos sus destinos en Lationamérica. Ha sido primero cónsul general en Santa Cruz (Bolivia) y luego número dos en Panamá.
Además del nombramiento de Borrell Mayeur, a partir del mes de agosto, el número dos de la Embajada de España en Estados Unidos será Pablo Sánz López; en Venezuela, Rodrigo Campos Af Frosterus y Javier González Sanjuán en Cuba. En La Habana será cónsul José Antonio Hernández Pérez-Solórzano, en sustitución de Carlos Perez-Desoy, que desempeñará el mismo cargo en Salvador-Bahía (Brasil).
Al margen de esos cuatro puestos, el resto de los 118 se rigen por un sistema de escalafón en la carrera. Los nombramientos de embajadores, que son discrecionales y requieren el visto bueno del Consejo de Ministros, no están incluidos en esta convocatoria, conocida entre los diplomáticos como el bombo y que se repite todos los años.
Este año los nombramientos se han retrasado por la pandemia de Covid-19 y llevan ya la firma de la recién nombrada susbsecretaria de Exteriores, Celsa Nuño.