Marlaska cruza sus propias "líneas rojas" y bate un récord que levanta ampollas
Interior anuncia dos nuevos acercamientos, tras la polémica por el trato de favor a uno de los secuestradores de Ortega Lara. La AVT ha hecho cuentas y denuncia un negro balance.
Tal vez solo sea una sucesión de casualidades, pero es un hecho. Siempre que el lendakari Íñigo Urkullu reclama el acercamiento de los presos de ETA al País Vasco, el Ministerio del Interior anuncia beneficios penitenciarios para varios reclusos terroristas.
Y ha vuelto a suceder este lunes, para indignación de los colectivos de víctimas, que ya la pasada semana alertaron del acercamiento de cuatro reos asesinos -entre ellos uno de los secuestradores de José Antonio Ortega Lara- que, además, no han cumplido los requisitos: arrepentirse y pedir perdón a sus víctimas. Y por ello señalaron al responsable de este trato de favor: Fernando Grande-Marlaska.
Interior ha ordenado este lunes el traslado de otros dos presos etarras condenados por terrorismo, Garikoitz Arruarte Santa Cruz y Gorka Joseba Lupiáñez Mintegui, lo que eleva a 41 (el 20% del total que cumplen condena) los etarras que se han beneficiado de un acercamiento al País Vasco y Navarra desde que en junio de 2018 llegó al ministerio Marlaska.
Según ha informado la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, Garikoitz Arruarte será trasladado desde la cárcel de Almería a la de Soria. Ingresó en prisión el 29 de diciembre de 2003 y tiene una condena de 20 años por homicidios frustrados, entre ellos la colocación de 28 kilos de dinamita en el Intercity Madrid-Irún en la Nochebuena de 2003.
El segundo preso trasladado de cárcel es Gorka Joseba Lupiáñez, en este caso pasando de Salamanca a Logroño. El interno, que ingresó en prisión el 11 de diciembre de 2007, se encontraba en la prisión salmantina en calidad de preso preventivo tras ser condenado por la Audiencia Nacional a 50 años al secuestrar a una pareja y su hijo para robarles la autocaravana, que usaron para atentar contra una torre de red eléctrica de Castellón en 2007.
La Asociación de Víctimas del Terrorismo no oculta su indignación con Marlaska al entender que ha traspasado las "líneas rojas" que él mismo se marcó al llegar a Interior, como no acercar al País Vasco a presos con delitos de sangre y exigir previamente un rechazo de la violencia y la colaboración con la Justicia.
De acuerdo a los datos de la AVT, en los dos años que lleva Grande-Marlaska se han autorizado 41 acercamientos de presos de ETA a cárceles próximas al País Vasco.
También se han autorizado la progresión al tercer grado o régimen de semilibertad de cinco etarras: Gorka Fraile, Javier Aguirre, Jagoba Codo, Fernando Alonso y José Ramón Fourira. En la actualidad hay unos 200 presos de la banda terrorista que siguen cumpliendo condena en las cárceles españolas, a los que se suman otros 30 que hacen lo propio en Francia.
"Consideramos que por parte del entorno de ETA y sus presos se está utilizando esta nueva política penitenciaria como 'método de lucha' no sólo para ser trasladados a prisiones próximas al País Vasco, sino para conseguir la libertad, verdadero objetivo del colectivo de presos", denuncia la AVT, que subraya que por este motivo no acudirán al homenaje del 27 de junio en el Congreso a las víctimas del terrorismo, convocando su propio acto al margen del institucional.