Montero desautoriza a Calvo y hace público un nuevo desencuentro en el Gobierno

La vicepresidenta Carmen Calvo, al filo de las 10 de la mañana: "Llegado el momento, el Gobierno puede decretar la alarma en una parte del territorio, si no en todo. Ojalá no lo tengamos que hacer, pero seremos responsables". La portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, a las dos de la tarde, tras la reunión del Consejo de Ministros: "El Gobierno no está estudiando ni en el corto ni en el medio plazo volver a decretar el estado de alarma".

La Moncloa ha vuelto a evidenciar este martes, en plena oleada de nuevos rebrotes a lo largo y ancho de toda España, que no tiene un plan establecido por si el Covid 19 sorprende con un repunte descontrolado durante la nueva normalidad ya instalada en la mayor parte del país. O que es rehén de sus alianzas con el PNV. Y víctima de su permanente guirigay interno.

Y parece cada vez más claro, que tras endosar la gestión de esta nueva etapa a los presidentes autonómicos, Pedro Sánchez parece más preocupado en sacar rédito político del fin de las restricciones del confinamiento y en la gestión de las negociaciones de los presupuestos generales que le garanticen su estancia en La Moncloa al menos dos años más.

Sobre todo porque el PNV tiene los seis votos claves para reactivar un hipotético nuevo estado de alarma y ya advirtió hace dos semanas que su apoyo a la última prórroga estaba condicionado a que el poder de decisión volviera definitivamente a manos de Íñigo Urkullu.

En el caso de los nacionalistas vascos, el apoyo a un nuevo estado de alarma como el planteado por Calvo se hace totalmente imprevisible, más aún a tres días del comienzo de la campaña electoral del 12-J. Fuentes peneuvistas consultadas por ESdiario han asegurado que la amenaza de la vicepresidenta a primera hora había provocado "sorpresa y malestar" en Ajuria Enea. "No es eso lo que el lendakari ha pactado con Sánchez", subrayan.

Sánchez, presidiendo la reunión del Consejo de Ministros de este martes.

Cabe recordar además, que tras el portazo de ERC, el decreto de la nueva normalidad del Gobierno va a salir adelante este miércoles gracias a los votos de PNV y Cs tras la negociación del PSOE con ellos. Aunque el PP ha anunciado este mismo martes su disposición a respaldarlo también.

Este nuevo ejemplo de descoordinación en La Moncloa apenas aparecidos los primeros rebrotes del virus se suma a la creciente preocupación expresada por comunidades autónomas, con Madrid a la cabeza, por la ausencia cada día más palpable de un plan integral de seguridad del Gobierno en los aeropuertos.

Los principales aeródromos, como los de Barajas, El Prat, Palma, Gran Canaria o Alicante, están comprobando que el triple control establecido por Sanidad es más que laxo. Y exigen que se ataje la situación con un nuevo plan de seguridad. Pero, como en el caso de los rebrotes que aumentan, no parece que La Moncloa haya previsto tal escenario de riesgo. Ni que haya preparado un plan B.