Las pruebas de los "tratos" del fiscal y Podemos fuerzan a Delgado a investigar
La Fiscalía General abre expediente al fiscal Ignacio Stampa por sus filtraciones a Marta Flor, la abogada de Pablo Iglesias. "Se abrazan", denunció Villarejo ya en noviembre de 2019.
La evidencia probatoria de los mensajes y las conversaciones entre dirigentes de Podemos reconociendo el tráfico de información privilegiada entre la Fiscalía Anticorrupción y la abogada de Pablo Iglesias, Marta Flor; y la profunda indignación del instructor del caso Villarejo, Manuel García Castellón, han obligado a la Fiscal General del Estado, Dolores Delgado, a ordenar a su Servicio de Inspección abrir oficialmente un expediente al fiscal Ignacio Stampa, por presuntamente adulterar la investigación de la pieza Dina.
La "inapropiada relación" entre Stampa y la letrada de Podemos en la causa que investiga el robo del teléfono de la exasesora de Pablo Iglesias en su etapa en el Parlamento Europeo, Dina Bouselhamm, y la ruptura de la orden de "sumario secreto" dictada por el magistrado del también conocido como caso Tándem, han forzado el movimiento de Delgado, ante el estupor general en la cúpula de la carrera, según reconocen a ESdiario fuentes fiscales.
Cierto es que llueve sobre mojado. Aunque su credibilidad ya entonces estaba muy tocada, el excomisario José Villarejo se plantó el 4 de noviembre de año pasado contra la turbia actuación de los fiscales en connivencia con la acusación particular ejercida por Podemos. "Se abrazan", llegó a denunciar el policía al juez García Castellón durante un interrogatorio en el despacho de este en la Audiencia Nacional.
Aquel día, al propio juez le llamó la atención el enfado de Villarejo, interrogado por otra de sus piezas derivadas, la llamada Land, sobre un presunto espionaje en favor de la administradora de la empresa Procisa, Susana García Cereceda, en pleno litigio por una herencia tras la muerte del empresario Luis García Cereceda.
"Se abrazan con Podemos", denunció Villarejo, ante un interrogatorio de los fiscales Stampa y Miguel Serrano que fuentes de la Audiencia Nacional calificaron entonces de "hostil y desafiante".
El comisario estalló y anunció al magistrado su intención de presentar una denuncia contra ambos fiscales ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid. En varios escritos dirigidos al instructor, Villarejo acusó a los fiscales de "filtraciones que le perjudicaban" y como "promotores de estrategias e investigaciones en su contra".
El fiscal anticorrupción Ignacio Stampa, la piedra angular del trato de favor de la Fiscalía a Iglesias.
Con este escenario, y ante las nuevas revelaciones de varios medios de comunicación -unido al último auto del juez urgiendo a Bouselhamm a despedir a la letrada que ha compartido con Pablo Iglesias-, a Dolores Delgado no le ha quedado más remedido que dar un paso al frente, presionada por la propia cúpula de su departamento.
Así que la Inspección Fiscal abrirá actuaciones para comprobar la posible relación personal existente entre el fiscal Stampa y la abogada de Podemos, Marta Flor, a "los efectos oportunos".
Comunicado oficial difundido este viernes por la Fiscalía General.
En una nota remitida por el departamento dirigido por Delgado se recuerda que el pasado 14 de febrero la inspección fiscal ya abrió un expediente como consecuencia del escrito presentado por una particular para determinar la imparcialidad de este fiscal a la vista de otras informaciones que también apuntaban a la relación personal entre el fiscal y la abogada.
No obstante, el 9 de marzo de 2020, el jefe inspector archivó esta investigación "al no tenerse constancia de la existencia de vínculos causantes del deber de abstención del fiscal, cuya inobservancia pudiera ser constitutiva, en su caso, de una infracción disciplinaria".
Ahora Pablo Iglesias tiene ya ante sí un triple frente judicial, fiscal y parlamentario. El juez García Castellón le tiene en su punto de mira por dos presuntos delitos de revelación de secretos y daños informáticos.
La Fiscalía rastrea las filtraciones. Y el PP ha exigido al vicepresidente segundo que se siente en el Congreso y dé todas las explicaciones de un asunto cada vez más turbio. Una cloaca en toda regla. De momento, este mismo viernes, Podemos ha apartado a su abogada de la causa para sustituirla por otra. Eso sí, Marta Flor seguirá representando a Dina Bouselhamm.