La crisis de Podemos da alas a la moción de Abascal con la incógnita del cartel
El líder de Vox dirige personalmente la búsqueda de un candidato independiente que visibilice la moción de censura. El acoso a Iglesias da una nueva visión a la iniciativa, que mira al PP
El Gobierno progresista ha arrastrado a España a tal carrusel de inestabilidad que desde que Santiago Abascal anunció el pasado 29 de julio una moción de censura contra Pedro Sánchez un verdadero tsunami ha sacudido la política nacional. Con el anuncio de la salida de España del Rey Juan Carlos y la consiguiente ofensiva radical de Podemos y los independentistas contra la Monarquía, y con la imputación de Podemos por presunta financiación irregular.
Dos sacudidas que han dado a la moción de censura que Vox pretende formalizar en septiembre una nueva dimensión. Y es que aquel 29 de julio, los análisis fueron unánimes: la legítima decisión de Abascal era un inmenso error estrátegico ya que culminaba en un incalculable balón de oxígeno para Sánchez e Iglesias. Dado que estaba destinada al fracaso y a la visibilidad renovada de la mayoría Frankenstein.
Fuentes de Vox aseguran a ESdiario que "ahora las cosas son distintas" respecto a aquel 29 de julio. Por que la imputación de Podemos como persona jurídica, la deriva del escándalo Dina y la imputación de Juanma del Olmo, alto cargo de la Vicepresidencia segunda, da alas a la moción de censura. Y según estas mismas fuentes "nos obliga a todos a retratarnos".
Con este todos, lógicamente en Vox se refieren sobre todo al PP. Y también a Ciudadanos. Este jueves, Pablo Casado e Inés Arrimadas dieron una muestra de unidad de acción para forzar una Diputación Permanente que obligue a Iglesias a comparecer en el Congreso ya mismo. Sin esperar a septiembre.
La moción de censura se va a convertir en un juicio a los escándalos de Podemos.
Los dirigentes que asesoran a Abascal han decidido adaptar su nueva estrategia a la situación derivada de la imputación de Podemos. Y planean convertir la sesión de la moción de censura en algo "instrumental" que ponga ante el espejo de sus contradiccione a Sánchez e Iglesias.
Algunos de estos dirigentes confiesan que bastará con que la oposición replique los mismos discursos que el presidente y su vicepresidente enarbolaron en la tribuna durante el debate de la moción de censura contra Mariano Rajoy.
Mientras, Abascal busca un candidato independiente de prestigio que visualice ese carácter "instrumental" de su moción. Algunos contactos muy preliminares en los aledaños del viejo PSOE no han dado sus frutos. También se rastrea entre veteranos dirigentes del PP próximos a la órbita de Abascal.
Pese a ello, Vox confía en arrastrar al PP a su estrategia. Este viernes, su diputado y candidato a las elecciones catalanas, Ignacio Garriga, se ha mostrado convencido de que la imputación de Podemos será el "detonante" para que Pablo Casado apoye la moción. Y ha animado a los diputados a que "antepongan España" a las siglas de sus partidos.