Delgado desautoriza al fiscal que acusa a Podemos de posible delito electoral
La Fiscalía General del Estado ha promovido un comunicado para matizar que el fiscal del Tribunal de Cuentas solo hacía una investigación interna y que además ni es competente.
La Fiscalía General del Estado ha salido al rescate de Pablo Iglesias al empujar a la Fiscalía del Tribunal de Cuentas a emitir un comunicado desautorizando al fiscal que ha apreciado indicios de delito en las cuentas de la formación referidas a las elecciones generales de abril del año pasado.
El documento lleva el membrete del órgano que dirige la exministra Dolores Delgado y que Pedro Sánchez presumió en una entrevista de tener a su merced. Aunque después va suscrito por la Fiscalía del Tribunal de Cuentas, como si su difusión hubiera sido iniciativa de esta última, motu proprio (que no lo ha sido).
En el mismo, la Fiscalía del Tribunal de Cuentas aclara que de entrada dicha investigación es "de naturaleza interna, dentro del procedimiento de fiscalización del Tribunal de Cuentas", y que en cualquier caso no será el Tribunal de Cuentas el que tenga la última palabra.
De hecho destaca que "la necesaria y ulterior investigación para determinar si tales irregularidades tienen relevancia penal corresponde a la Fiscalía competente, por razón de la materia y del territorio".
E insiste: "La Fiscalía del Tribunal de Cuentas carece de competencia para iniciar cualquier investigación de naturaleza penal. Sí tiene atribuciones en el ámbito de la fiscalización y del enjuiciamiento contable, de acuerdo con lo establecido en el artículo 16.2 de la Ley de Funcionamiento del Tribunal de Cuentas".
Por último, se lamenta de "la filtración efectuada de un documento interno del propio Tribunal de Cuentas".
Tribunal que Podemos está dedicándose a desacreditar desde que este viernes se supo que su fiscal había puesto las cuentas de Iglesias en su radar. Según la formación, es un órgano controlado por completo por el PP y que se utiliza "de forma partidista" para "atacar a sus adversarios y proteger sus chanchullos".
En paralelo, el próximo martes la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, ha convocado una Diputación Permanente (en agosto no hay plenos) en la que se decidirá sobre la petición del PP y Cs de que comparezca el vicepresidente segundo para dar explicaciones por la financiación de Podemos.
Ambos partidos registraron dicha solicitud cuando un juez de Madrid citó como imputados al partido y a tres de sus dirigentes para que declaren sobre la denuncia planteada por el exabogado de Podemos, José Manuel Calvente. El PSOE tendrá que retratarse en la votación.
Iglesias, Irene Montero y el resto de dirigentes morados, por su parte, siguen más interesados en que se hable del "acoso y hostigamiento" al que según ellos les está sometiendo la extrema derecha. Pero no de sus cuentas.