Ayuso presenta un ambicioso plan para reactivar Madrid pese a Sánchez
La presidenta madrileña anuncia una bajada del IRPF, ayudas a la economía y el fortalecimiento de la colaboración público privada como ejes del resto de su mandato, marcado por la pandemia.
Isabel Díaz Ayuso le ha salido respondona a Pedro Sánchez. Que el presidente del Gobierno quiere subir los impuestos; la presidenta madrileña anuncia una bajada -otra- de medio punto en el tramo autonómico del IRPF en esta legislatura, aplicable a todos los contribuyentes.
Que el presidente margina a la educación concertada y a la especial en el fondo Covid-19 para escuelas; la presidenta madrileña anuncia un proyecto de ley para "blindar el derecho de los padres a elegir la educación de los hijos".
Que el presidente y su socio de Gobierno apuestan por poner todos los huevos en la cesta de lo público; la presidenta madrileña canta las bondades de la colaboración público privada y se compromete a mantenerla y mejorarla.
"Somos una administración que acompaña, que no impone bajo dogmas políticos e identitarios", proclamó este lunes Díaz Ayuso durante su discurso en el debate del estado de la región, el primero de su mandato. Y del que la presidenta madrileña quiere salir licenciada como líder del Ejecutivo que combate en primera línea de batalla políticas las políticas de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias.
La voz de la presidenta madrileña sonó grave en la tribuna de la Asamblea de Madrid, consciente de la situación que atraviesa una comunidad que, antes de la pandemia, llevaba 22 trimestres consecutivos de reducción del paro y había acabado el año creando en el último trimestre nada menos que el 85% del empleo del país (según la EPA). Además de bajar, por primera vez desde 2008, de la barrera del 10% del desempleo.
Por eso empezó sincerándose con los madrileños y confesándoles que ha sido "el año más difícil para ningún gobernante". Y en el caso de Madrid, con un gobierno de coalición por primera vez en su historia que ha pasado por altibajos y que tiene públicas y notorias diferencias.
Aun así, Díaz Ayuso quiso agradecer a su socio, Ignacio Aguado, que se haya mantenido "al margen del deshonor que pretende el PSOE", en alusión a esa moción de censura con la que el secretario general de los socialistas madrileños -que no su portavoz en la Asamblea, Ángel Gabilondo-, está tentando a Ciudadanos. "Cómo necesitamos su ayuda y no sus intrigas", se quejó de José Manuel Franco.
La presidenta madrileña anunció una batería de medidas destinadas a que la economía madrileña recupere el torrente sanguíneo. Junto a la bajada en el impuesto de la renta, Díaz Ayuso anunció un Plan Alquila Joven, una inyección de liquidez para el turismo de 17 millones de euros, ayudas a la cultura, una Ley de Mercado Abierto para aflojar a los empresarios y autónomos el corsé regulatorio y una modificación en el sistema de licencias urbanísticas "para ganar competitividad".
Isabel Díaz Ayuso junto a su vicepresidente y socio de gobierno, Ignacio Aguado.
Junto a ello, también detalló importantes inversiones en la Sanidad y los servicios sociales. Entre ellas un plan a tres años dotado con 80 millones de euros para reforzar la Atención Primaria, que se ha resentido con el sobreesfuerzo que ha requerido el coronavirus. El proyecto incluye ampliar las plantillas y mejorar la retribución de los profesionales, en respuesta a la huelga indefinida que el sindicato AMYTS -el mayoritario- convocó la semana pasada y a partir del 28 de septiembre en los centros de salud.
Además, la líder del Ejecutivo regional comprometió 200 millones de euros para las seis universidades públicas de la Comunidad en los próximos cuatro años, que permitirá aumentar el número y cuantía de las becas. Y un incremento de las inspecciones de oficio en las residencias de mayores, agujero negro de la pandemia.
Y, aunque sin caer en el victimismo, sí se quejó de que Madrid sufre "una constante campaña de desprestigio". "Cuando hay un problema o un error es madrileño. Cuando hay un acierto es de fuera", sostuvo.
Tras su discurso, cercano a las dos horas, el debate quedó interrumpido hasta este martes, que será cuando se reanudará con las intervenciones de los grupos y cuando Díaz Ayuso tendrá que bregarse realmente.
Aunque ya adelantó la portavoz de Podemos, Isabel Serra, en Twitter, que por lo pronto la bajada de impuestos anunciada no les ha gustado un pelo: "PP y Cs insisten en bajadas de impuestos regresivas para seguir degradando los servicios públicos. Ni con una pandemia encima asumen que su proyecto ideológico es incompatible con protegernos y combatir la desigualdad. Es un gobierno de pirómanos", sentenció.