Los gastos del Congreso caen en picado desde que sus señorías no viajan fuera
La suspensión de los viajes al extranjeros, que desde marzo han sido sustituidos por videoconferencias, ha supuesto el ahorro de un buen pellizco para las arcas de las Cortes.
La presidenta del Congreso, Meritxell Batet.
La pandemia ha obligado a cambiar los habituales viajes al extranjero de sus señorías por videoconferencias, que están resultando mucho más económicas para las arcas de las Cortes. Aunque para los afectados no tienen el mismo atractivo, puesto que tradicionalmente diputados y senadores se pelean por esas salidas a gastos pagados.
En lo que va de año, el Congreso se ha ahorrado 806.456 euros respecto a 2019 en los viajes internacionales de los parlamentarios. Este año quedaron interrumpidos en el mes de marzo a causa de la pandemia. Hasta entonces había habido 11 en el primer trimestre, con un gasto total de 207.855 euros. El año anterior las Cámaras gastaron 1.014.311,9 euros en 66 viajes fuera de España.
En esas cantidades están recogidos únicamente los gastos en transporte y alojamiento, puesto que la manutención va aparte y es a mayores: los diputados pasan las comidas, cenas, cafés y demás justificados y el Congreso se los abona; los senadores, por contra, tienen una dieta de 150 euros cuando están en el extranjero y no tienen que justificar.
En ocasiones parte de los gastos son sufragados por el país anfitrión, en el caso de tratarse de una invitación. Por ejemplo, a participar como observadores en un proceso electoral.
El último viaje de este año fue, según datos de la Cámara Baja, un viaje a Estocolmo (Suecia) que hizo la delegación española en la Asamblea Parlamentaria de la OTAN entre los días 9 y 11 de marzo. Y cuyo coste ascendió a 2.878 euros. Fue muy económico en comparación con otros. El que hicieron varios de sus señorías a finales de enero a Estrasburgo (Francia) para participar en la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa costó bastante más: 113.349,84 euros.
Menos participación
Precisamente esta semana ha habido otra Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (suele haber cuatro al año), pero su coste ha sido cero euros para las Cortes, puesto que se ha celebrado por videoconferencia. En ella han participado las diputadas Valentina Martínez, Susana Sumelzo, María Teresa Jiménez-Becerril y Esther Peña y los senadores Antonio Gutiérrez, Laura Castel, Gonzalo Robles, María Luisa Bustinduy y María del Carmen Leyte.
En realidad, la actividad internacional de los parlamentarios no se ha suspendido durante los meses de pandemia, pero sí ha quedado reducida a videoconferencias, y las hay todas las semanas. Así que el interés de diputados y senadores por participar se ha visto reducido.
