La Guardia Civil detiene a los financiadores del lujo de Puigdemont en Bélgica
El independentismo se ha llevado un buen golpe después de una operación policial que ha ido directamente a por los afines a Puigdemont que ponían el dinero para su causa.
La Guardia Civil ha ido directamente a por el corazón financiero del independentismo. De hecho, ha detenido a David Madí, Xavier Vendrell, Oriol Soler y Josep Lluís Alay acusados de desviar fondos públicos para el independentismo en connivencia con dirigentes del Govern liderado por el expresidente Quim Torra y que formaban parte del entramado empresarial que presuntamente financia de manera ilegal la estancia del presidente Carles Puigdemont en Bélgica.
Según el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña durante este miércoles se están practicando "31 entradas y registros, repartidos en 8 partidos judiciales de Cataluña, por delitos relacionados con la corrupción y desórdenes públicos", dentro de una investigación en una pieza secreta referente a unos presuntos delitos de malversación, blanqueo de capitales y prevaricación en la Diputación de Barcelona.
Madí fue portavoz y secretario de Comunicación y Estrategia de CDC en gobiernos de Jordi Pujol y mano derecha de Artur Mas, el hombre que movía los hilos de las estrategias independentistas que derivaron en el 'procés'.
Por su parte, a Oriol Soler, vinculado a ERC, se le considera el ideólogo del 'estado mayor' que diseñó la estrategia y la comunicación del referéndum del 1-O, del que también formaba parte Vendrell y Madí.
Junto a ellos, también ha sido detenido Xavier Vendrell, exdirigente de ERC y antiguo militante de Terra Lliure, fue diputado y conseller de Gobernación en el tripartito de Pasqual Maragall, y luego desempeñó su actividad en el mundo empresarial.
En relación a Josep Lluís Alay, que tras su detención ya ha sido puesto en libertad, es un historiador muy próximo al expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, de hecho es el director de la oficina del expresidente, y fue uno de las personas que le acompañó en su viaje de Finlandia a Slesvig-Holstein.
Según el TSJC, otros de los investigados son el presidente de la Plataforma ProSeleccions Catalanes, Xavier Vinyals; empresarios relacionados con eventos deportivos como Antonio Fuste; Roc Aguilera; el alcalde de Cabrera de Mar (Barcelona), Jordi Mir, y el interventor delegado, Jordi Serra; y Pilar Contreras y Marta Molina.
Además, el operativo de la Guardia Civil rastrea el desvío de fondos públicos y posibles vínculos de los detenidos con la plataforma Tsunami Democrátic, que organizó las protestas masivas contra la sentencia del Tribunal Supremo que condenó hace un año a los líderes del 1-O.
El independentismo cree que este es un ejemplo más de la "represión"
La avalancha de detenciones ha provocado la reacción en tromba del independendentismo con el propio Puigdemont a la cabeza, que ha asegurado que las detenciones producidas en la operación de la Guardia Civil por presunto desvío de fondos al independentismo buscan "la muerte política y civil" del mismo.
"Tres años después de la declaración de independencia seguimos luchando por una causa justa y democrática. No lo han conseguido, y no lo conseguirán. Todo el apoyo a los detenidos en este nuevo zarpazo represor", ha asegurado en su perfil oficial de Twitter.
Junto a él se ha manifestado también Artur Mas, que ha calificado de a "operaciones-espectáculo" a las detenciones. "Grandes detenciones, grandes historias, y después resulta que todo es un tema de construcción, muy a menudo, de gran repercusión mediática", ha señalado el expresidente.
También el líder de ERC, Oriol Junqueras, considera que estas detenciones son una muestra más de la "represión", insistiendo en que no desfallecerán en su lucha "por la libertad, la justicia social y la república catalana".
En la misma línea se ha mostrado el presidente del Parlament, Roger Torrent, que ha sostenido que el conflicto catalán necesita una "solución política que desactive la represión policial y judicial" y ha calificado de "montaje para criminalizar al independentismo" a la operación de la Guardia Civil.
Además, a modo de protesta los diputados de JxCat, ERC y la CUP han abandonado todas las comisiones que se celebraban este miércoles en el Parlamento catalán.