Madrid sigue su plan: se blinda en la Constitución y el contagio sigue cayendo
La Comunidad de Madrid apuesta por evitar los desplazamientos más allá de las fronteras autonómicas de cara a uno de los puentes más largos del año para reducir los contagios
Ayuso seguirá con su estrategia de cerrar perimetralmente la Comunidad de Madrid durante los grandes puentes y apostar por los confinamientos por zonas básicas de salud de forma habitual. Unas medidas que están dando sus frutos y que según ha detallado hoy el viceconsejero, Antonio Zapatero, ha permitido bajar de 300 la incidencia acumulada por cada 100.000 habitantes, de manera que ya se sitúa en 297.
Así, Zapatero ha anunciado que la Comunidad de Madrid se cerrará perimetralmente durante 10 días, desde las 00.00 horas del 4 de diciembre, viernes, hasta las 00.00 horas del lunes 14, debido a que "la movilidad en torno a ese puente tan amplio con tantos días festivos es tan grande que por precaución tomamos una medida quirúrgica, como es la de cerrar solamente esos días".
Además, ha recordado que sigue vigente el toque de queda desde las 00.00 horas hasta las 6.00 horas, por lo que no está permitido salir a la calle durante esta franja horaria.
Junto a ello, el dirigente regional ha explicado que la Comunidad ha rebajado el umbral a los 400 casos por cada 100.000 habitantes para aplicar restricciones quirúrgicas al movimiento en las Zonas Básicas de Salud, por lo que se aplicarán las marcadas en Artilleros, en el distrito de Vicálvaro, y la zona básica la Elipa, en Ciudad Lineal. Además, en el resto de la región, las zonas de Cuzco, Castilla la nueva y Alicante, en Fuenlabrada, y La Moraleja, en Alcobendas serán confinadas.
Por su parte, reabre partir del lunes 23 las zonas del Barrio del Puerto y Doctor Tamames, en Coslada; Pintores, en Parla; y en Madrid: Puerta del Ángel (distrito de Latina), Villaamil (Tetuán); Virgen de Begoña (Fuencarral-El Pardo) y Núñez Morgado, en el distrito de Chamartín.
De esta manera, la Comunidad de Madrid sigue con el plan que tenía establecido, cerrando solo los puentes y manteniendo las fronteras abiertas de la región de manera habitual, lo que un inició generó un nuevo enfrentamiento con el ministerio de Sanidad, que consideraba necesario el cierre perimetral durante 15 días, aunque finalmente, parece que los datos están dando la razón a Ayuso.