El Rey envía un mensaje al Gobierno sin citarlo: "Todos con la Constitución"
La Pascua Militar ofrece a Felipe VI la ocasión que esperaba para hacer un encendido elogio de la Constitución y para garantizar la unidad en torno a ella.
El Gobierno había deslizado la idea de que el Rey utilizaría su discurso en la Pascua Militar, su segunda gran cita pública anual tras los discursos de Nochebuena, para exhibir una especie de condena de los mensajes, emitidos por distintos militares retirados, defendiendo incluso una especie de Alzamiento, en ocasiones con frases despectivas.
Pero lo que se encontraron es a un Rey Felipe que no se refirió directamente a esos hechos aislados y, en su lugar, reivindicó la aportación de las Fuerzas Armadas a la democracia con un contundente mensaje, vestido de Almirante de todos los Ejércitos, en defensa de la Constitución, atacada por una parte del Gobierno y por los partidos que lo sustentan desde fuera.
El Rey lanzó un contundente alegato en defensa de la Carta Magna, de la que él mismo es su cúspide simbólica, que en condiciones normales hubiera sonado a trámite pero que en las actuales, con presiones a la Corona y una abierta campaña contra el "Régimen del 78", tenían como sutiles receptores a Pedro Sánchez y a Pablo Iglesias. O a eso sonó, de manera impecable e indirecta.
La Constitución, dijo, es "el camino libre y democráticamente decidido por el pueblo español" y el "origen de la legitimidad de todos los poderes y de todas las instituciones del Estado". "Todos estamos incondicionalmente comprometidos con ella", añadió delante de Pedro Sánchez, la ministra de Defensa, Margarita Robles, del titular de Interior, Fernando Grande Marlaska, y de toda la cúpula militar.
Para no dejar dudas, el Jefe del Estado insistió como nunca en la misma idea, una sutil enmienda a la totalidad del discurso que encarnan Podemos, ERC y Bildu y que incluso ha alimentado el PSOE, dispuesto hasta ayer a impulsar una Ley de la Corona restrictiva que ahora se antoja inviable.
"La legitimidad se renueva cada día respetándola y observándola", añadió, antes de enviar un último recado en el que ensalzó la Constitución como "reflejo de España, fuente de cohesión, marco y garantía de convivencia, de estabilidad y de solidez democrática".
El Rey no se refirió ni a Sánchez ni a Iglesias, pero todo su discurso sonó a una enmienda a la deriva del Gobierno y sus socios
Su "Viva España" y el "Viva el Rey" que atronó en el Salón del Palacio Real enmudecieron algunos de los mensajes contra la institución que más han sonado en las últimas semanas y arrojan un balance muy positivo para Felipe VI en plena tormenta: sus discursos de Nochebuena y de la Pascua le han hecho salir reforzado de la Navidad, en el peor momento, hasta el punto de que ya se especula abiertamente con un retorno próximo de don Juan Carlos, al que no se mencionó en ningún momento.
El contacto con Sánchez
Antes de todo ello, el presidente del Gobierno recibió a los Reyes a su llegada a la Plaza de la Armería del Palacio Real de Madrid. Al bajarse del coche oficial, don Felipe, con el uniforme de gala de almirante de la Armada, y doña Letizia saludaron a Sánchez y a los dos ministros que le secundaron, con una Margarita Robles muy alineada luego con el Monarca en su discurso.
Tras la interpretación del himno nacional y de las 21 salvas, el rey ha pasado revista a una formación de la Guardia Real acompañado por el jefe de Estado Mayor de la Defensa (Jemad), general Miguel Ángel Villarroya, y el del Cuarto Militar, Emilio Gracia Cirugeda. Todos con mascarilla, símbolo de una pandemia de la que el Rey se acordó para homenajear a sus casi ya 80.000 víctimas mortales.