El "milagro" de Juanma Moreno se consolida dos años después en el peor contexto
Las encuestas y estudios internos del PP auguran que además de tener los números para seguir gobernando, Moreno ganaría las próximas Elecciones.
Hace ahora dos años, Juanma Moreno (PP) se convirtió en el presidente más inesperado de la Junta de Andalucía, al menos para un PSOE acostumbrado a campar por aquella tierra como Pedro por su casa: le quitó la mayoría absoluta a Susana Díaz y, desde ese hito, logró cerrar un Gobierno de coalición con Ciudadanos, en una fórmula que después se extendió por Madrid, Castilla y León o Murcia.
Incluso "domesticó" a VOX, un respaldo externo pero no extremo: las artes de Moreno, cuentan en Andalucía, lograron a la vez calmar a los de Abascal; integrar a los naranjas de un Juan Marín siempre considerado más cerca del PSOE y, de paso, desactivar la ofensiva desatada por los socialistas y Podemos antes incluso de tomar posesión.
Porque Susana Díaz llegó a fletar autobuses para oscurecer la toma de posesión del nuevo presidente y Pablo Iglesias activó la ínclita "alerta antifascista", en ambos casos inflamando los acuerdos con VOX, hoy aceptados con normalidad por la sociedad andaluza, pero presentados entonces como una amenaza contra las mujeres, la libertad y el sistema de ayudas para los desfavorecidos.
Hoy todo esta apaciguado y, según explican a ESdiario fuentes de San Telmo, sede de la Presidencia, la sintonía entre Moreno y Marín, entre PP y Ciudadanos, es "absoluta" y duradera: tanto como para que se especule por una lista conjunta o una integración de los dirigentes naranjas en las filas populares si Ciudadanos no remonta el vuelo o la relación de su líder en Andalucía con Inés Arrimadas sigue deteriorándose.
Hacia arriba
Los estudios internos incluso reflejan un significativo avance de Juanma Moreno, que además de tener los números para seguir gobernando, ganaría las próximas Elecciones, previstas para finales de 2022: algo que en el pasado solo logró Javier Arenas, pero de manera infructuoso ante las combinaciones que pudo trabajar Manuel Chaves con IU.
Moreno ha calmado a VOX, integrado a CS, desactivado al PSOE y reorientado al PP a la vez en dos años muy duros
Esos sondeos, alguno público como el de ABC de este lunes, le dan al PP el triunfo con 34 diputados y una horquilla de entre 33 y 36, suficientes para derrotar a un PSOE sin un líder claro, con Susana Díaz más discutida que nunca por Pedro Sánchez y la sensación de que, si pueden, hará con ella lo mismo que con Iceta en Cataluña: buscar un Illa para relevarla, con la ministra María Jesús Montero a la cabeza de todas las quinielas.
La misma encuesta otorga 19 diputados a VOX y 11 a Ciudadanos, conformando una cómoda mayoría de 64 diputados, muy por encima de los 55 para lograr la mayoría absoluta en el Parlamento andaluz. Fuentes populares no lanzan ninguna campana al vuelo, y menos en una situación de pandemia y crisis económica que afecta como nunca al país.
Pero sí son conscientes de que el ciudadano medio valora la actitud de Moreno, capaz de hacer amistad personal con Pedro Sánchez de cuando éste era un joven diputado y aquel un cargo intermedio en la Administración de Rajoy. Y capaz, también, de haber sido decisivo en el viraje al centro del propio Pablo Casado, ya definitivamente alineado en la manera de entender la estrategia política de Moreno o de Feijoó.