Los Mossos culpan a Vox por ir provocando: "No han seguido las indicaciones"
Desde el partido de Abascal responden tras los altercados: "Son unos auténticos canallas. Nosotros convocamos nuestros actos y permiten que la gente esté a muy pocos metros de nosotros".
El sábado fue en Vic, el domingo en Salt y Valls y así casi a diario. Los altercados protagonizados por quienes se hacen llamar "antifascistas" (son sobre todo personas del entorno de la CUP) se han convertido en lo habitual en los actos de campaña de Vox.
"Agresiones, lanzamiento de objetos, daños en los vehículos, destrucción del material técnico y de propaganda", enumera la formación de Santiago Abascal, que el domingo se encaró con el responsable del operativo de los Mossos en Salt (Gerona), tras una lluvia de piedras y otros objetos: "¿Vas a seguir permitiendo esto?", le recriminó el presidente del partido.
Pero la policía autonómica catalana niega estar "de brazos caídos", como lo califica Macarena Olona. Un portavoz oficial consultado por ESdiario responsabiliza a Vox por no hacer caso de las "recomendaciones y consejos" que se les da antes de cada acto, sobre "lo que es aconsejable y lo que no".
"Muchas veces ocurren (los incidentes) porque no se han seguido las indicaciones. Como en el caso de Vic", aseguran las mismas fuentes. No obstante, desde los Mossos se niegan a detallar cuáles son esas indicaciones alegando "motivos de seguridad". "Las tienen que saber quienes las tienen que saber, nadie más", zanjan.
'Hacemos nuestro trabajo desde una posición neutral', afirma un portavoz de los Mossos
"Cada dispositivo está adecuado al tipo y circunstancias del acto. Nosotros hacemos lo que tenemos que hacer y estamos donde tenemos que estar", continúan. "Nosotros hacemos nuestro trabajo desde una posición neutral y no vamos a entrar en el juego de unos y otros", concluyen.
Pero irremediablemente la violencia contra Vox ha embarrado la campaña, en tanto que los Mossos tienen mandos políticos. Empezando por el consejero de Interior, Miquel Sàmper, que sin nombrar a Vox se refirió este lunes en TV3 a las "provocaciones de candidatos que se saltan de forma sistemática las indicaciones de los cuerpos policiales que conforman los dispositivos de seguridad". Era obvio a quiénes se refería, puesto que ni un solo independentista ha condenado los sucesos.
El día en que se produjo el hostigamiento a cargos de Vox en Vic, el consejero Sàmper estaba haciendo campaña en Matadepera con el preso Josep Rull (ahora en tercer grado) para Junts per Catalunya. Ellos no tuvieron problema de seguridad alguno.
En consejero de Interior (con chaqueta marrón) en un acto con Josep Rull el sábado.
En Vox no dan crédito al intento de culparlos a ellos. "Hay instrucciones políticas para que nos acogoten y luego para decir que lo provocamos, es un auténtico asco", insisten desde la dirección nacional en declaraciones a este periódico. "Son unos auténticos canallas. Nosotros convocamos nuestros actos y permiten que la gente esté a muy pocos metros de nosotros. Ayer (por el domingo) en el acto de Salt teníamos la gente a 40 metros lanzándonos huevos, piedras, manzanas, cebollas... todo que llegaba hasta el atril, un puñetero escándalo", añaden.
El partido de Abascal ha anunciado que en los próximos días promoverá una declaración institucional en todas las instituciones donde tiene representación (Congreso, Senado, parlamentos autonómicos y ayuntamientos) para que se produzca una condena.
Y además denunciará al consejero Sàmper ante la Junta Electoral por dificultar el normal "desarrollo de unas elecciones libres en un país democrático". En el fondo Vox cree saber lo que está pasando: que el independentismo está "nervioso" ante los buenos pronósticos de Ignacio Garriga en las encuestas.