La impactante foto de Gabilondo "en la lona" que frustra a todo el PSOE
El "sablazo" fiscal que ultima Sánchez echa por tierra las alicaídas expectativas del PSOE madrileño, irritado pero maniatado ante el Gobierno de España y sus planes.
La imagen es una metáfora del estado de ánimo en la candidatura de Ángel Gabilondo: en ella se ve cómo la lona inmensa que colocó con su cara en la emblemática plaza de Callao es retirada, este miércoles, tras la decisión de la Junta Electoral que la prohibía.
Y precisamente eso, la sensación de caerse a la lona y de replegarse sobre sí mismo, se ha extendido en el PSOE madrileño y en la candidatura encabezada a regañadientes por Gabilondo, que de verse como Defensor del Pueblo tuvo que aceptar encabezar un cartel del que se veía fuera por el adelanto decidido por Ayuso: un último servicio a Sánchez, que le dejará marcharse al puesto anhelado si no logra la presidencia de la Comunidad de Madrid.
Algo que cada día parece más difícil, con las encuestas en la mano y el zarpazo a sus opciones que le ha llegado desde el propio Gobierno de España con su anuncio de un histórico "sablazo" fiscal que tiene a Madrid por principal objetivo. La sensación de funeral entre los socialistas madrileños se ha instalado, y la "indignación" con ese anuncio también, según confirman a ESdiario desde el entorno del viejo profesor.
Nadie lo dirá en público, intentando cuadrar el círculo de las subidas anunciadas por Sánchez y la congelación fiscal comprometida por Gabilondo, pero el enfado es enorme: el Gobierno tiene que enviar sus propuestas a Bruselas antes del 4M; pero al PSOE madrileño le venía fatal que se conocieran antes de la cita con las urnas.
Gabilondo lleva el daño por dentro, pero el PSOE madrileño bufa con el sablazo fiscal impulsado por Sánchez
"Si ya era difícil, ahora se pone todo muy cuesta arriba", reconocen fuentes socialistas, que depositan muchas de sus opciones en una eventual entrada de Ciudadanos en la Asamblea de Madrid, algo que ahora mismo ninguna encuesta recoge: la práctica totalidad no da opciones a Edmundo Bal de lograr el 5% mínimo, y algunas incluso ponen en duda que lo logre Pablo Iglesias con Podemos.
Objetivo: el 10%
"Pero es que hasta si al final lo consigue Bal, Arrimadas ya ha aclarado que su prioridad es pactar con el PP", añaden. Y aún hay una preocupación más: el trasvase de votos desde el propio PSOE al PP, que los cuarteles generales de ambos partidos cifran ya en un 5%.
Si Ayuso lograra atraer a un 10% de antiguos votantes socialistas, atraídos por el madrileñismo de la presidenta, su mayoría absoluta se rozará con los dedos. Y Gabilondo, discreto pero preocupado, lo sabe.