De la Vega vuelve a auxiliar al Gobierno tras ocultar del dictamen de los fondos

No solo colaboraron en ocultar el informe sobre el decreto de los fondos, sino que además siguen defendiendo al Ejecutivo. El Consejo de Estado, máximo órgano consultivo del país, sigue trabajando como una extensión más de Moncloa auxiliando al Gobierno. Esta vez aseguran que Sánchez siguió casi al 100% las indicaciones marcadas por ellos.Así lo ha asegurado su presidenta, María Teresa Fernández de la Vega, que al ser preguntada en una rueda de prensa por el dictamen ha asegurado que el Gobierno refrendó "todas las observaciones esenciales" a pesar de que, tal y como ha recordado, no era vinculante. "Todas se han visto reflejadas en el texto del decreto", ha subrayado.

Según ha reivindicado, algunas voces hablaban de deficiencias del decreto, aunque ha asegurado que no se señalaban ni en el decreto ni el dictamen, sino que se recogían en la memoria que acompañaba al dictamen. "Pero el dictamen es seguido en el 98%", ha recalcado.

Pero no solo ha auxiliado al Ejecutivo, sino que ha ido aún más allá al asegurar que el Consejo de Estado "hace una alabanza" a la estructura que ha preparado el Gobierno "en tan poco tiempo" para distribuir los fondos y la ha calificado de "correcta".

Considera que es una estructura "adecuada" que, tal y como ha señalada, se puede ir reforzando a lo largo del tiempo y que el Consejo de Estado felicitó al Gobierno por haber tenido esa capacidad de crear una estructura así en este espacio de tiempo.

Informe "demoledor"

Sin embargo, en su informe, el Consejo de Estado no fue tan complaciente con el Ejecutivo como ahora intenta decir su presidenta, sino todo lo contrario. En sus casi 100 páginas puso de manifiesto su "preocupación ante la eliminación o modulación de mecanismos de control en materias tan sensibles como la contratación administrativa, los convenios administrativos o las subvenciones".

Además recriminó las prisas con las que Calvo acudió a él el 16 de diciembre, por lo que hubo que convocar una reunión extraordinaria y telemática de la Comisión Permanente el día 21 para aprobar el dictamen un día antes de que el decreto ley fuera a la mesa del Consejo de Ministros.

De hecho, argumentó que disponía de "escasos días para examinar un proyecto normativo tan extenso y de tanto calado, lo que hace muy difícil un estudio pormenorizado del mismo, máxime si se tiene en cuenta que el expediente remitido únicamente contiene la versión definitiva del proyecto y la escueta memoria que lo acompaña".