El inhabilitado juez Garzón vuelve al ruedo para insultar a Ayuso y a Casado

El inhabilitado juez ha saltado a la palestra para atacar a dos de los referentes del PP, Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso. El exmagistrado se ha cebado especialmente con la presidenta madrileña considerando que su labor está cargada de "malicia".Garzón hace mucho tiempo que ya no se esconde, mostrando su inclinación hacia la izquierda y publicando numerosas críticas contra los populares, y esta vez se ha centrado en la figura más emergente del partido, Ayuso.

Dice de ella que durante la campaña electoral que le permitión mantenerse de forma contundente en la Puerta del Sol, su "estrategia fue abrir los bares, no hacer cierres perimetrales, confinar sólo barrios pobres, enfrentarse al Gobierno central en cada decisión y desmarcarse del resto de comunidades autónomas, un ¡no! rotundo a las restricciones, una categórica determinación de cuestionarlas de forma sistemática bajo el título de ¡sí a la libertad! sin importar la tasa de incidencia ni menos la de mortalidad", asegura en un artículo publicado en Infolibre.

De hecho, llega a añadir que "en el camino, como víctimas colaterales de esta macabra contienda, han quedado enterrados en el olvido miles de mayores fallecidos en las residencias madrileñas, donde la gestión de la comunidad durante la pandemia se caracterizó por el abandono", dibujando a Ayuso como una persona que no le importa nada ni nadie con tal de mantenerse en el poder.

Así, vuelve a insistir en que la presidenta madrileña, cargada de "malicia", apostó por unas nuevas elecciones "para quitarse de encima a Ciudadanos", la misma malicia que, asegura, guió a Pablo Casado al criticar a Garamendi por sus palabras sobre los indultos.

"Como se ve, los “maliciosos” en general son amigos que cuando te atreves a contradecirlos se quitan la careta mostrando el rencor que les invade y se transforman en los peores enemigos", sentencia el exjuex.

Junto a ello, y ya centrándose en Casado, asegura que "tergiversa la historia"; realiza una "permanente negación de la verdad"; para zanjar que "las palabras llevan tanto veneno que cuando las lanzan tiñen el ánimo de ponzoña".