Margarita Robles cuestiona al TC por no plegarse a la postura del Gobierno

La ministra de Defensa, Margarita Robles, considera que "el Gobierno hizo lo que tenía que hacer" y se opone así a la decisión del Tribunal Constitucional de considerar que el confinamiento domiciliario de marzo de 2020 fue inconstitucional, ya que debió ampararse por el estado de excepción, añadiendo una dura crítica a los jueces, sus compañeros de profesión, por no dar la razón al Gobierno.La ministra ha concedido una entrevista en la cadena Ser donde ha comenzado mostrando su respeto al Tribunal Constitucional: "Máximo respecto al TC. Conozco a todos los magistrados, algunos son amigos. Yo fui autoridad delegada durante el estado de alarma". Pero ha tardado poco en hacerlo volar por los aires, ya que ha afirmado que el tribunal de garantías responde a elucubraciones doctrinales.

"El Gobierno hizo lo que tenía que hacer y actuó según la legalidad. Responde a elucubraciones doctrinales. Está claro que el TC ha estado dividido. Jurídicamente es un debate doctrinal. Me duele que el TC haya entrado en ese debate que es respetable, lo entiendo. Pero me duele que el TC haya estado con filtraciones durante todo este tiempo", ha dicho la ministra de Defensa.

La ministra se ha reafirmado en que: "El confinamiento era la única medida posible para salvar vidas" señalando incluso que el Gobierno se siente orgulloso de haberlo hecho. "Me siento muy orgullosa del trabajo que se hizo. Los debates doctrinales están muy bien, pero quizá no deberían ponerse en la sentencia", ha dicho la ministra de Defensa lanzando así un último ataque hacía en Tribunal constitucional.

La ministra ha asegurado que tiene "el máximo respecto" a este tribunal y a los jueces que lo componen, con algunos de los cuales incluso tiene una relación de amistad, según ha dicho. Sin embargo, considera que deberían "tener un sentido de Estado y saber cuál es la realidad", y ha recordado que, en el auto emitido el 30 de abril de 2020, el propio tribunal concluía que "el confinamiento era la única medida adecuada" para frenar la propagación del virus.

"Dijo que la única forma de salvar vidas era un confinamiento o una limitación extrema de los contactos entre las personas, e incluso decía que el legislador, en el año 81, no había podido de ninguna manera prever las circunstancias que dieron lugar al estado de alarma", ha destacado.

Por su parte, la recién estrenada ministra de Justicia, Pilar Llop, ha compadecido en Moncloa y ha insistido en que el Gobierno respeta, pero "no comparte", la decisión del Tribunal Constitucional de declarar ilegal el confinamiento del primer estado de alarma de la pandemia, ha defendido que fue declarado "conforme a los parámetros constitucionales" que el Gobierno decretó ajustándose a la legalidad de la Carta Magna.