Garzón desafía retador a Sánchez desde la misma Moncloa y vuelve con el chuletón
El ministro de Consumo ha evidenciado este martes que no hay un gobierno, hay dos. Envalentonado tras saberse intocable, ha vuelto a retar al presidente tras ser desautorizado... de palabra.
Lejos de hacer propósito de enmienda o automatizarse tras ser desautorizado por Pedro Sánchez, el ministro de Consumo, Alberto Garzón, ha vuelto a demostrar este martes que los miembros morados del Consejo de Ministros van por libre. Y, además, ha sacado pecho de su posición de fuerza para mantener su pulso con el presidente.Garzón ha enfatizado que "no se mueve un ápice" de lo manifestado durante la polémica suscitada por su campaña sobre el consumo moderado de carne, dado que defendió el modelo de ganadería extensiva, y ha recordado que forma parte de un Gobierno progresista "profundamente comprometido" con el cambio climático.En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros y en las mismas dependencias de La Moncloa, preguntado sobre si se sintió desautorizado por Sánchez cuando dijo sobre su iniciativa que un "chuletón al punto" era "imbatible", Garzón ha respondido que sobre este asunto "ya se ha escrito y dicho todo lo que se tenía que decir".
También ha incidido que en esta lucha es "especialmente importante" la ganadería "social, familiar y extensiva", un modelo "perfectamente sostenible, que crea empleo, previene incendios y protege la economía local"."Es un modelo que necesitamos defender", ha enfatizado el titular de Consumo para insistir que el Ejecutivo es consciente de las consecuencias "catastróficas" del cambio climático, especialmente graves en la cuenca mediterránea y en España, sobre todo en este tipo de sectores. Por tanto, esta es la línea de trabajo que defienden y que "no se mueve un ápice de lo que dijo en su momento"Sobre la remodelación del ala socialista del Ejecutivo, Garzón ha dicho que se entra en una nueva fase de legislatura y que los cambios acometidos son "muy oportunos". Pero ha añadido a continuación que en el caso de Unidas Podemos ya hicieron en su espacio político los cambios de "mayor magnitud posible" cuando se marchó Pablo Iglesias por lo que no contemplan una reestructuración adicional.