Una telefonista del 112 casi pierde el trabajo por una denuncia falsa de Podemos
La diputada balear Gloria Santiago consiguió que abrieran un expediente a la trabajadora porque, según ella, había estado poco empática ante un delito sexual. Por suerte todo quedó grabado.
La diputada de Unidas Podemos Gloria Santiago.
La trabajadora del 112 a la que una diputada de Unidas Podemos del Parlamento de Baleares intentó que expedientaran o incluso echaran de su trabajo ha resultado ser completamente inocente.
El Gobierno del Principado de Asturias ha decidido cerrar sin sanción alguna el expediente que abrió a una telefonista del servicio de emergencia que el día 6 de agosto atendió la llamada de Gloria Santiago, vicepresidenta del Parlamento balear.
Ésta denunció en sus redes sociales y también ante la Guardia Civil que, mientras hacía sola el Camino de Santiago, un hombre empezó a seguirla y se masturbó delante de ella. Y que cuando llamó a emergencias, la mujer que le atendió le riñó por ir sola. Que fue poco "empática".
A partir de ahí empezó una pesadilla para la trabajadora, dada la notoriedad de la denunciante. En todo momento ella se defendió y también sus compañeros del 112 salieron en su defensa, afirmando que la llamada había sido atendida siguiendo escrupulosamente el protocolo en casos de presuntos delitos sexuales.
Por suerte para ella, todo había quedado registrado. Tras revisar la grabación telefónica, el Gobierno del Principado constató que la telefonista no había hecho nada malo. Solo su trabajo.
"Desde los servicios técnicos me comunican que no se abrirá sanción porque en el audio se puede comprobar que no hay ningún tipo de tono bronco, ni recriminación, por el hecho de que la diputada estuviera haciendo el Camino de Santiago sola. Se le hicieron preguntas protocolarias que se hacen, ya sea un hombre o una mujer, sea el Camino de Santiago o una montaña. Siempre se pregunta si está la persona sola o acompañada", anunció la consejera de Presidencia, Rita Camblor, según recoge el diario La Nueva España.
"No sale tono bronco en ningún momento de la audición, que no se puede hacer pública pero que está guardada a buen recaudo por si se necesitara por alguna de las partes", continuó.
La diputada morada en cuestión, que a raíz del desagradable episodio montó toda una campaña por el derecho de las mujeres "a no ser violentas" y a "ser libres y dueñas de nuestros pasos", ahora guarda silencio. Nada ha dicho Gloria Santiago.
Por lo que respecta a la trabajadora, por fortuna para ella había una grabación. De no haberla habido era su palabra contra la de toda una vicepresidenta del Parlamento de Baleares.