Los represaliados de Cuba exigen ayuda a España entre el silencio de Podemos
La izquierda sigue blanqueando a la dictadura cubana que hace mucho que ya no se esconde y manifiesta abiertamente su desprecio a la separación de poderes de las democracias modernas.
El silencio a veces es ensordecedor y, sobre todo, deja entrever el doble rasero que tienen las formaciones políticas de la izquierda cuando se trata de la defensa de los derechos humanos. Y es que algo se está cociendo en Cuba. Los ciudadanos están cansados de la dictadura cubana y ya preparan grandes manifestaciones pese a las amenazas del Gobierno, mientras los aliados de los Castro en España, callan.
La cita será este lunes día 15 y la Fiscalía cubana ya ha avisado a los organizadores de que pueden incurrir en varios delitos si continúan adelante con su intención de llevar a cabo las protestas previstas, puesto que su solicitud para celebrar movilizaciones en ocho provincias de la isla ya fue rechazada el pasado 12 de octubre "por ilícitas".
Mientras tanto, la oposición en España ya ha movido ficha. El presidente del PP, Pablo Casado y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, han firmado junto a más de 70 políticos, escritores y economistas de América Latina y España, una carta de respaldo al pueblo cubano en la que apoyan la manifestación convocada para el 15 de noviembre y piden la liberación de los presos políticos.
En la misiva, ha mostrado su solidaridad con el pueblo cubano "en su lucha por la libertad y la democracia", han reclamado que los cubanos tienen derecho a elegir su futuro y que sus demandas son "legítimas" y "necesarias" para la construcción del Estado de Derecho en la isla.
La carta la firman también el premio Nóbel de Literatura, Mario Vargas Llosa y los expresidentes de Argentina, Mauricio Macri de México, Ernesto Zedillo y de Uruguay, Alberto Lacalle. También el exmandatario de Ecuador, Lenín Moreno, de Bolivia, Jorge Quiroga y de El Salvador Alfredo Cristiani. En España también aparecen la expresidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre y el filósofo Fernando Savater.
Respaldo desde el PP a la manifestación cubana
"Apoyamos y respaldamos el llamado a la manifestación pacífica del próximo 15 de noviembre convocada por diferentes sectores de la sociedad civil", dice la carta, promovida por la Fundación Internacional para la Libertad.
Asimismo pide la liberación de los "presos políticos y de conciencia", en especial aquellos que fueron detenidos por manifestarse "pacíficamente" el pasado 11 de julio, día en el que Cuba "elevó un grito de libertad y democracia" y le mostró a la comunidad internacional que los cubanos están "de pie en la lucha" por la conquista de sus derechos y la construcción de una democracia, tal como indica el texto. "Es el pueblo cubano quien pide, al igual que hace tiempo lo hizo Jose Martí, una República con todos y para el bien de todos", añade.
Desafío de la disidencia al castrismo
Por su parte, el colectivo Archipiélago, organizador de la protesta y sin reconocimiento legal en Cuba, informó esta semana que, ante la negativa del Gobierno de la isla a permitir lo que han llamado "marcha cívica", han propuesto a la ciudadanía "una serie de iniciativas" para ampliar la participación "hacia la liberación de los presos políticos, la democracia y el Estado de derecho", cuenta en su página de Facebook.
Y es que, la disidencia cubana está dispuesta a desafiar a la dictadura. De hecho, el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) ha solicitado este viernes a la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, que promueva una acción internacional en favor del derecho de los cubanos a "manifestarse libremente sin ser reprimidos" de cara a las protestas previstas.
Para el OCDH existe una alta posibilidad de que se "repitan las acciones violentas contra los manifestantes como el pasado mes de julio". "La respuesta del Gobierno ha sido la expulsión de sus centros de trabajo de algunos de los convocantes y la amenaza de la Fiscalía sobre el hecho de que tendrán que enfrentarse a las consecuencias en caso de que decidan marchar", destacan.
Piden a Gobierno que interceda
Mientras, en España, la escritora cubana Zoe Valdés ha enviado una carta al ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, José Manuel Albares, en la que le pide que España apoye a los "demócratas cubanos" e interceda para lograr la liberación de los presos políticos tras las protestas del pasado mes de julio en Cuba.
"España no puede olvidar y dejar solos a los demócratas cubanos. Pedimos compromisos y apoyo con nuestras acciones de libertad. Pedimos interceder por los presos políticos y apoyar las voces del pensamiento desde el exilio", reclama al ministro de Exteriores en su misiva, publicada en su web.
"En Cuba no se trabaja con la división de poderes, se trabaja con la unidad de poderes"
Sin embargo, el Ejecutivo mira para otro lado, mientras el Gobierno de Díaz Canel no se esconde y deja clara cual es su postura ante los valores de la democracia. En un vídeo difundido en redes sociales, el jefe del Gobierno cubano reniega de la separación de poderes básica en cualquier estado de derecho.
"En Cuba no se trabaja con la división de poderes, se trabaja con la unidad de poderes a través de órganos que tienen funciones diferentes", decía Díaz Canel, para explicar que "el concepto del poder que se usa en Cuba, es el concepto del poder popular que esta subordinado, o se construye, en el concepto de soberanía popular y hay soberanía popular cuando, como dice uno de los artículos de la Constitución todo está en función del soberano, el pueblo". Pero el pueblo, en Cuba, no es soberano, pues no puede manifestarse frente a un Gobierno que lo controla todo.