Moncloa "enchufa" por tercera vez a Irene Lozano tras dar la espantada de Madrid
La que fuera fichaje estrella de Sánchez y "escribiente" de sus memorias encuentra acomodo público en la Casa Árabe, tras renunciar a su escaño tras la victoria de Ayuso el 4-M.
Irene Lozano y Pedro Sánchez
Siete vidas tiene un gato, tantas como recolocaciones políticas lleva la que en su día fue diputada de UPyD, Irene Lozano, y azote entonces de la corrupción socialista, que acabó como fichaje estrella de Pedro Sánchez y convirtiéndose en firme defensora del sanchismo y en coautora de las memorias del líder socialista.
Este jueves, Sánchez y Lozano han vuelto a sorprender tras anunciarse que la segunda deja la Asamblea de Madrid, su último destino, para acabar colocada a dedo de nuevo como directora de la Casa Árabe, un centro estratégico en las relaciones de España con el mundo árabe como la institución se define.
Lozano cobrará en su nuevo destino 90.000 euros de nómina del erario público, el tercer enchufe que encadena desde que se afilió al sanchismo. Irene Lozano fue de quinta en la lista del PSOE a la Asamblea de Madrid para reforzar la candidatura de Ángel Gabilondo el 4-M abandonando la Secretaría de Estado del Deporte, un puesto en el que no había destacado por su gestión. Apenas seis meses ha durado su etapa de diputada autonómica madrileña.
La relación de Irene Lozano con el PSOE de Sánchez comienza cuando el actual presidente del Gobierno la ficha como número 4 de las listas socialistas para las elecciones de 2015, con UPyD ya en proceso de descomposición. El fichaje fue polémico ya que Lozano le quitaba la plaza a otros destacados socialistas cuando ella hasta ese momento había hecho discursos muy duros contra el PSOE desde la tribuna del Congreso.
La "negra" de Manual de Resistencia
Lozano logró su acta de diputada, esta vez ya con el PSOE, pero en las elecciones de junio de 2016 renunció a repetir en las listas, alegando motivos profesionales. Sin embargo, con la moción de censura y la llegada de Sánchez a la Moncloa, reapareció como flamante secretaria de Estado de la España Global, cargo con 110.000 euros de sueldo y coche oficial.
Muchos socialistas no entendían el empeño de Sánchez por rescatar de nuevo a Lozano, hasta que se descubrió que Lozano fue la coautora del libro de Sánchez, Manual de Resistencia, que publicó a los pocos meses de llegar a la presidencia del Gobierno. Desde entonces, Lozano ha ido de oca a oca en cargos de la administración sanchista, lo que muchos socialistas interpretan como un pago de favores por los servicios prestados con el libro.
El cuestionado ascenso al Deporte
El siguiente destino de Lozano fue el de presidenta del Consejo Superior de Deportes del Gobierno de España, con rango de secretaria de Estado, una decisión muy criticada ya que "sin tener ni idea de deporte, la eligieron para que hiciera lo que se le mandase", en palabras del periodista deportivo José María de la Morena. Eso sí, con sueldo público de 108.698 euros brutos al año.
El siguiente movimiento de Sánchez con Irene Lozano fue enviarla a la Asamblea de Madrid para colocar también a dedo en el Consejo Superior de Deportes a José Manuel Franco, ex delegado del Gobierno en Madrid y ex secretario general del PSOE de Madrid.
Sánchez pagó así al líder socialista de Madrid su papel el 8-M y Lozano acató yendo a la Asamblea. Ahora el presidente del Gobierno vuelve a pagarle un nuevo favor a la coautora de su libro, rescatándola por tercera vez en tiempo récord.
