Datos frente a la alarma: las vacunas funcionan y evitan el colapso sanitario

Cuando medio mundo está dando la voz de alarma ante la nueva variante del virus, ómicron, y las comunidades autónomas acuden a los tribunales para solicitar la autorización del certificado covid para acceder a diversos establecimientos, hay datos evidentes que llaman a la tranquilidad por mucho que los más alarmistas pretendan provocar el pánico e iniciar de nuevo con las restricciones.

Que la vacunación funciona, es un hecho incontestable a la vista de las estadísticas que el propio Ministerio de Sanidad ha hecho públicos. La tasa semanal de mortalidad de las personas vacunadas entre 12 y 60 años es 0,0, según la actualización de la situación del pasado 2 de diciembre, donde el departamento dirigido por Carolina Darias, analiza la incidencia del virus y su mortalidad haciendo distinciones entre los que ya se han inoculado los viales y los que no.

Para hacer el cálculo, el Ministerio explica que realiza una "estimación de la tasa semanal media a lo largo del periodo por 100.000 personas, tomando como numerador el total de casos de cada nivel de gravedad en cada categoría de vacunación notificados esa semana a la RENAVE y, como denominador, el número medio de personas en similares categorías a lo largo del periodo, según el Registro de vacunación y la población del INE a enero de 2020".

De hecho, en términos absolutos ninguna persona, de entre 12 y 30 años, ha fallecido a consecuencia del covid, en las últimas ocho semanas, mientras que en la franja de edad de entre 30 y 59 años, solo han fallecido 16.

Además, si se tienen en cuenta las hospitalizaciones, otro de los puntos claves a la hora de establecer restricciones para evitar un colapso en la sanidad, los datos son aún más demoledores. De las 262 personas hospitalizadas, entre 12 y 30 años, de las que se conoce su situación acerca de la vacunación, 61 había recibido la pauta completa frente a los 182 que no.

En el tramo de edad siguiente, es decir, de 30 a 60 años, 1.799 personas han sido ingresadas, de los que 761 habían sido inoculadas contra el virus, frente a las 974 que no estaban inmunizados, de manera que queda patente que, pese a que las vacunas no impiden infectarse sí que evitan la posibilidad de complicaciones graves que lleven a la hospitalización e incluso a la muerte.

Pero los datos ofrecidos por el Ministerio también dejan claro que la vacunación provoca una menor posibilidad de contagio. De hecho, según cita el propio informe "entre el 20 de septiembre y el 21 de noviembre de 2021, la incidencia en personas completamente vacunadas es muy inferior a la observada en no vacunadas".

Además, destaca que "la mayor diferencia se observa en personas de 60 a 80 años, con un riesgo de infección en en vacunados casi 7 veces menor, de hospitalización 16 veces menor y de fallecimiento 14 veces menor respecto a no vacunados. En el grupo de 30 a 59 años, la incidencia total es 2 veces inferior y 9 veces inferior para hospitalización".

De hecho, las tasas semanales indican claramente esta tendencia pues en las últimas ocho semana el número de infectados por cada 100.000 habitantes es de 31,2 para los vacunados, frente al 77,9 de los no vacunados.

Aún así, las comunidades autónomas, ante la falta de una estrategia común por parte del Gobierno, han apostado por comenzar a endurecer las restricciones ante el ascenso de los contagios y la proximidad de las fiestas navideñas.

La incidencia acumulada en los últimos 14 días por 100.000 habitantes se sitúa en 234,03, y sigue al alza por lo que con la intención de no volver a revivir unas navidades como las pasadas, algo poco probable por la existencia de las vacunas, las autonomías se han centrado en la implantación del certificado covid.

Más de 20 millones de ciudadanos, el 42% de la población española, que necesitarán disponer de certificado covid para acceder a determinados establecimientos

Así, en este puente, Aragón, Baleares, Cataluña, Galicia, Murcia, Navarra y la Comunidad Valenciana son las siete autonomías que solicitan el pasaporte de vacunación para acceder a determinados espacios.

En las últimas horas, se pueden sumar el País Vasco, que en la actualidad está estudiando la sentencia del Tribunal Supremo que autoriza al Ejecutivo Vasco a implantar este certificado, y Canarias, que está a la espera de lo que decida su Tribunal Superior de Justicia.

En el caso de Andalucía, la Justicia ha pedido adecuarlo en el tiempo, mientras que Asturias, Castilla y León y Cantabria están estudiando implantarlo también en sus territorios. Por el contrario, se desmarcan del resto de regiones la Comunidad de Madrid, Castilla-La Mancha, Extremadura y La Rioja, que a día de hoy no tienen intención de solicitarlo o imponerlo.

La nueva variante ya está en España

Aún así todas las miradas están puestas en ómicron, la nueva variante del virus que ha obligado a restringir los vuelos de países procedentes del sur de África y que ya ha llegado a nuestro país, después de que se haya detectado el primer caso en el Hospital Gregorio Marañón de Madrid, tras secuenciar el virus de un viajero procedente de Sudáfrica.

Sin embargo, una vez que ya han sido diagnosticados al menos 6 casos de la nueva variante, el que más preocupa por ser transmisión comunitaria, se trata de un varón de 62 años que no tiene antecedentes de viaje ni contacto estrecho con otra persona que proceda de países en los que se ha detectado esta variante.

Asimismo, se investigan otros dos casos con sospecha de infección por esta nueva variante, ambos con síntomas leves y también sin antecedentes de viajes a países de riesgo.

Se están analizando las consecuencias

Por el momento, no está claro si la variante podría reducir la eficacia de las vacunas actuales. En un informe técnico publicado esta semana, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha resaltado que "a pesar de las incertidumbres, es razonable suponer que las vacunas disponibles actualmente ofrecen cierta protección contra la enfermedad grave y la muerte".

Al respecto, la directora de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), María Jesús Lamas, ha indicado en su comparecencia en el Congreso de los Diputados, que la "relevancia epidemiológica" de esta nueva variante sigue siendo "todavía incierta".

Sin embargo, las alarmas están encendidas ante su aparición que ya ha llegado a nuestro país pues aún no se conoce si es más transmisible o más letal que el resto de las cepas y más después de las palabras de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, que ha pedido “prepararse para lo peor”.