Bildu consuma su infamia y Sortu asciende al último "hombre fuerte" de ETA

El último jefe que tuvo la banda terrorista ETA, ya tiene nuevo cargo político. David Plá ha terminado entrando en la formación política Sortu, la heredera de Batasuna, -declarada ilegal por la justicia- y uno de los partidos que integran Bildu. El exlíder etarra accede a una de las secretarías del partido.

El que fuera máximo líder de ETA pasará a ser el responsable del Marco de Orientación Estratégica, un tipo de vicesecretaria tercera. Formará parte de un equipo de cinco mujeres y cinco hombres que dirigirán el partido de la izquierda abertzale, anexionado con EH Bildu, partido con el que el Gobierno ha pactado recientemente los Presupuestos Generales del Estado.

El de Pla no será el único cargo que ocupará alguien relacionado de forma directa con ETA: Elena Beloki, alias 'Ana', quien fuera responsable de 'Saki', el aparato internacional de ETA, pasará a ocupar otro cargo dentro de la cúpula independentista. Lo hará como responsable del área de política exterior. Beloki fue condenada a trece años de cárcel por pertenencia a banda terrorista.

Según recoge Sortu en un comunicado, los miembros del partido han debatido en una ponencia sobre la elección de sus órganos de dirección en el marco de su tercer Congreso, en donde podría resultar reelegido para la secretaría general Arkaitz Rodríguez, quien actualmente ocupa ese cargo.

Pla es ya un veterano en la izquierda abertzale que llegó a leer la carta de disolución de ETA con un pasamontañas en la cabeza. Nacido en 1975 en Pamplona, tiene a sus espaldas varias décadas de militancia política y terrorista. Empezó su carrera en la política, como portavoz de Jarrai, la organización juvenil proetarra. Después fue candidato de Herri Batasuna en la capital navarra en las elecciones municipales de 1995, si bien en aquella ocasión no resultó elegido.

Aunque finalmente Pla acabaría en el bando armado del independentismo. Fue detenido por primera vez en Zaragoza, por entre otras cosas, seguir al entonces alcalde de la capital aragonesa, José Atares, del Partido Popular. Fue condenado por pertenencia a banda terrorista a 6 años de cárcel, algo que él mismo reconoció en sede judicial.

Informes policiales recogieron que Pla había recibido instrucciones del dirigente etarra Francisco Javier García Gaztelu, 'Txapote', para extender a toda España una infraestructura estable, consistente en pisos, vehículos y documentación falsa, a fin de que posteriormente fuera utilizada por los comandos operativos

Después de cuatro años de cumplir aquella condena, Pla fue arrestado en 2010 otra vez. Al ser puesto en libertad por las autoridades galas, pasó a la clandestinidad y acabó liderando el aparato político de la organización terrorista en los últimos años de vida de la banda.

Tras el arresto el 15 de abril de 2010 en Hendaya, el Ministerio del Interior encabezado por el socialista Alfredo Pérez Rubalcaba dijo de Pla que era uno de los "hombres fuertes" del 'aparato político' de la banda terrorista ETA. En 1995, se presentó como candidato de Herri Batasuna en las elecciones municipales, aunque no resultó elegido y huyó a Francia, donde vivió con su pareja y su hijo.