Podemos convierte la tensión con Rusia en un campo de minas para Sánchez

El presidente de Estados Unidos tiene claro que más pronto que tarde Rusia invadirá Ucrania, lo dijo alto y claro en la Casa Blanca: "¿Creo que pondrá a prueba a Occidente, a EE UU y a la OTAN, tan significativamente como pueda? Sí, creo que lo hará", dijo Joe Biden. Por ello, desde España ya se han tomado las primeras medidas como miembros de la Alianza Atlántica lo que ha supuesto en enfado de Podemos, que ha despertado el fantasma del 'No a la guerra' preparando un auténtico campo de minas para Sánchez.

Tal y como avanzó este jueves ESdiario, Margarita Robles ha anunciado que España adelanta a la próxima semana el envío previsto de la fragata 'Blas de Lezo' de la Armada dentro de una misión de la OTAN y la opción del despliegue de cazas del Ejército del Aire por primera vez en Bulgaria.

Sin embargo, varios cargos de Unidas Podemos ha calificado de "temerario" y un "error" alentar con despliegue militar la "escalda bélica" en Ucrania por defender los intereses y "bravuconadas" de Estados Unidos (EEUU), en plena crisis entre Rusia y Ucrania.

El diputado de Unidas Podemos y secretario primero de la Mesa del Congreso, Gerardo Pisarello, ha tildado de "irresponsable" que, tras el "fiasco" de Afganistán, Europa siga a Estados Unidos (EEUU) en "bravuconadas belicistas", en pleno clima de tensión entre Rusia y Ucrania. "¿Está es la supuesta 'autonomía estratégica' de Europa frente a las grandes potencias? Muy lamentable. No en nuestro nombre", ha apuntado en redes sociales.

Ante esta crisis, la secretaria de Internacional de Podemos, Idoia Villanueva, ha recibido con "honda preocupación" el "incremento de la tensión bélica en Ucrania", ante lo cual rechaza el "aumento de los movimientos de tropas y el envío de buques y cazas a la zona".

Por tanto y a través de un comunicado, ha apostado por la "distensión" y la "autonomía estratégica" para defender los propios intereses de Europa, al entender que la extensión de la OTAN hacia Ucrania y Georgia "obedece exclusivamente a intereses de EEUU y pone en riesgo la paz".

Por tanto, demanda una postura coordinada entre las distintas sensibilidades de los países comunitarios, dado que es necesario "frenar la escalada bélica" que "agrave el conflicto".

Rescatan el 'No a la guerra'

A ello se suma la reivindicación del lema 'No a la guerra' que se popularizó en rechazo a la presencia de España en la guerra de Irak durante el mandato de José María Aznar, como han trasladado el portavoz parlamentario, Pablo Echenique, y el coportavoz de la formación morada, Pablo Fernández.

Incluso el secretario de Estado de la Agenda 2030 y también secretario general del PCE, Enrique Santiago, ha señalado que “empujar la OTAN hasta Rusia es un grave error para Europa, amenaza la paz y es estratégicamente torpe: subirán el gas, el petróleo, la inflación...”.

Aun así, desde el Gobierno se prefiere mantener la calma. El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha insistido en que la postura de España la fija el presidente del Gobierno, obviando las críticas de Podemos, y ha dejado claro que la UE mantendrá la "unidad". "Unidad en el diálogo, pero también en la disuasión si fuera necesario, pero no estamos en ese escenario", ha dicho.

En un desayuno informativo de Europa Press, ha insistido en que es "inaceptable" pretender "volver atrás" a la época en la que "un país dictaba a otro qué esquema de seguridad podía tener, quien podían ser miembros de una organización determinada". "No es así como se ha conseguido la paz y el progreso en Europa", ha subrayado.

Por ello, se mantiene firme en la postura del Gobierno y ha insistido en que "España no se esconde". Cree que la comunidad internacional está "conteniendo la respiración" pero ha insistido en seguir apostando por la vía del diálogo para lograr la desescalada. "Pero diálogo no es negociación", ha recalcado.

Cisma en el Gobierno

Pero lo cierto es que si tarde o temprano la tensión se desboca y la OTAN o la UE tienen que intervenir y con ellos España, la situación para Sánchez se complica ya que Podemos está dispuesto a agitar viejos fantasmas del pasado y oponerse a cualquier intervención militar.

Un nuevo cisma en el Gobierno se avecina y de una trascendencia mucho mayor que las anteriores, ya que Sánchez tendrá que posicionarse o bien al lado de las instituciones internacionales o al lado de sus socios de Gobierno, que ya han avisado al Jefe del Ejecutivo de que piense "bien los pasos a dar" y "mida mucho" su papel en esta crisis, dado que apartarse del "camino correcto" del "no a la guerra" es "un error gravísimo".

El presidente siempre se ha mostrado al lado de la UE, pero las relaciones con Estados Unidos no pasan por su mejor momento. Ninguneado por Biden, esta ocasión se plantea como una oportunidad de lujo para volver a colocar a España en el mapa de países influyentes a nivel internacional, pero puede volverse en contra. Si ese 'No a la guerra' que vuelven a enarbolar desde Podemos termina por calar en la sociedad española, puede suponer el fin para Sánchez.