Las "72 razones" por las que Belarra no rompe el Gobierno pese a la traición
Los podemitas acumulan numerosos cargos de confianza en el ejecutivo de coalición que llegan a cobrar hasta los 80.000 euros anuales. El "chiringuito" que no quieren desmontar.
Yolanda Díaz, Irene Montero y Ione Belarra
En Podemos no dejan de repetir que se sienten “traicionados” -otra vez- por el “giro radical” de Pedro Sánchez en relación a la postura del Sáhara Occidental. La propia Yolanda Díaz escenificaba este enfado acusando al presidente de “incoherente”, “enorme opacidad” y “formas incorrectas”. Sin embargo, a la vez que decía esto, descartaba rotundamente romper el Gobierno de coalición.
La pregunta que está surgiendo entre las propias bases moradas es por qué Podemos no se sale del Gobierno si como ellos mismos aseguran Sánchez les ningunea y se salta sus acuerdos.
La respuesta puede llevar aparejada muchas razones, aunque algunos señalan en concreto 72: los cargos de confianza que ostentan los podemitas en sus respectivos ministerios entre secretarios de estado, directores y asesores.
Unos cargos que pueden a llegar a cobrar 80.000 euros anuales, que es el salario que tiene fijado por ejemplo Yolanda Díaz. Ione Belarra, que por cierto es la ministra de Podemos con más cargos de confianza en su ministerio, 22 eventuales, cobra 75.000 euros anuales -74.858,16 euros para ser exactos-, lo mismo que Irene Montero, Alberto Garzón y Joan Subirats.
Fuera del Gobierno, es posible que Díaz, Montero o Garzón continuaran en política puesto que también son diputados… pero no sus casi 80 asesores y cargos de confianza. Y la bancada de la oposición puede ser muy fría.
Además de la cuestión económica, está la simple estrategia política. A nadie se le escapa que Podemos está estancado en las encuestas y que salir del Gobierno no le garantiza una mejora electoral, e incluso podría serle perjudicial porque perderían el altavoz de los ministerios y el dinero público que destinan a sus campañas y asociaciones afines.
Las últimas citas electorales no han ido bien a la marca de Podemos -ahí están los resultados en Castilla y León- y a la espera de que Yolanda Díaz lance su plataforma y se reconfigure el espacio a la izquierda del PSOE -habrá que ver en qué queda esto y cómo afecta al equilibrio de poder dentro del propio Podemos-, a la cúpula morada le parece mejor seguir en los despachos ministeriales.
