ESdiario

Sánchez hace de la educación su gran baza ideológica para adoctrinar a los niños

La nueva reforma de la educación secundaria, que elimina las calificaciones numéricas y deja a elección del profesor la promoción de los alumnos, provoca las dudas en el Consejo de Estado.

Pilar Alegría y Pedro Sánchez

Pilar Alegría y Pedro Sánchez

Publicado por
Miguel Centeno

Creado:

Actualizado:

El Consejo de Ministros aprueba este martes el nuevo decreto que modifica sustancialmente el Bachillerato en nuestro país. A partir de ahora, los alumnos podrán obtener el título cuando aprueben todas las materias o con una asignatura suspensa y estudiarán solo el periodo histórico del siglo XIX en adelante. Unos cambios, los más sustanciales, que se implantarán en el año académico 2022-2023 para 1º de Bachillerato y en el curso 2023-2024 para el 2º curso

Esta reforma se suma a la de las enseñanzas mínimas de la Educación Secundaria Obligatoria (ESO), donde la promoción de los alumnos no vendrá determinada por el número de suspensos. Esta decisión quedará en manos del equipo docente que decidirá en función de si el alumno tiene "expectativas favorables de recuperación”. Es decir, que si el profesor quiere, un alumno puede pasar de curso con todas las materias suspensas.

Esta norma, que se implantará en el año académico 2022-2023 para los cursos de 1º y 3º y en el curso 2023-2024 para 2º y 4º, recoge que promocionarán curso quienes hayan aprobado todo o suspendan una o dos materias y, además, se eliminan, como en la educación primaria, las calificaciones numéricas, así como los exámenes extraordinarios.

Una reforma educativa que no termina de convencer al Consejo de Estado (CE), un órgano consultivo del Ejecutivo que, aunque su opinión no es vinculante, refuerza las normas que reciben su visto bueno total. Y en este caso no es así. Según ha publicado el diario "El País", el máximo órgano consultivo del Gobierno tiene dudas sobre el “previsible impacto” del “lenguaje abstracto” de la norma en “las posibilidades de las comunidades autónomas, y del correspondiente profesorado, de abordar con las suficientes garantías, y atendiendo a los calendarios legalmente impuestos, la adecuada adaptación de sus sistemas educativos a los sucesivos cambios normativos en la materia”.

Es decir, que hay dudas de que esta norma, aprobada a mitad de año escolar, llegue a aplicarse a principios de septiembre, cuando empiece el nuevo curso. Esa es la intención de Sánchez, pero el Consejo de Estado lo ve complicado, ya que el proceso legal es más lento, debido a que las Comunidades Autónomas todavía tendrían que completar el 50% del currículo, algo que llevaría tiempo y podría dejar "colgados" a los alumnos.

Pero no es la única duda que ve la institución en esta reforma socialista. Según el diario "ABC", se ha comunicado al Gobierno en ese informe que existen dudas sobre la metodología aplicada por el Ministerio de Educación de Pilar Alegría, tachándola de "abstracta", "compleja" y "difícil de aplicar en las Comunidades Autónomas".

El CE aconseja a Educación que la memoria que acompaña a este tipo de proyectos normativos "contenga algunas reflexiones sobre dicha evolución [en la metodología], su enfoque y su incidencia, mayor o menor, en los contenidos que realmente se prevé impartir en esta etapa educativa”. Es decir, que se justifique por qué se hace la reforma, qué se pretende lograr con ella y qué cosas va a cambiar en las escuelas.

Las claves de esta reforma educativa

Este decreto recoge muchas modificaciones curriculares para los alumnos. Entre ellas, la que más ha sonado ha sido la de que la asignatura de Historia de España de 2º de la ESO, que se centrará en la etapa contemporánea, desde 1812. "En mi último curso de Bachillerato, yo no estudié toda la Historia española desde la Antigüedad hasta la actualidad. Hay muchas generaciones de españoles que no han estudiando más que la edad contemporánea porque no es la única materia de Historia que hay en la enseñanza", ha dicho en declaraciones a los medios el secretario de Estado de Educación, Alejandro Tiana.

En cuanto a la obtención del título, los alumnos podrán obtenerlo cuando aprueben todas las asignaturas del ciclo. No obstante, mantiene la excepción de poder conseguirlo con una pendiente, si así lo decide el equipo docente, en caso de que considere que ha alcanzado los objetivos y competencias; que no se haya ausentado de manera continuada y no justificada a clase; que se haya presentado a todos los exámenes; y que la media de las notas obtenidas en todas las materias sea igual o superior a cinco.

Así, un alumno que haya aprobado todas las asignaturas excepto una, podrá presentarse a la Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU), si cumple dichos requisitos. "Les hemos puesto condiciones. No es que se ahorren una materia. No es eso en absoluto. Es que en determinadas condiciones puedan compensar", ha explicado Tiana ante las críticas, al tiempo que ha recordado que en el ámbito universitario esto ya es posible.

Respecto a la promoción, los alumnos pasarán de 1º a 2º cuando hayan superado las materias cursadas o tengan evaluación negativa en dos materias como máximo. Otra novedad es que, si bien la superación de las materias de 2º estará condicionada a la superación de las materias de 1º, el alumnado podrá matricularse de asignaturas de 2º sin haber cursado la correspondiente materia de 1º

La reforma de la ESO, también en el punto de mira

La reforma que Sánchez quiere imponer en la Educación Secundaria (ESO) también cuenta con puntos muy controvertidos. Donde más daño ha hecho ha sido en la parte de la ideología impuesta por el Gobierno para tratar de controlar el pensamiento crítico de los alumnos, obligando a los alumnos de 12 a 16 años dos nuevas asignaturas sobre digitalización y emprendimiento, con lo que ellos denominan "perspectiva de género”.

En el Real Decreto se establece que los alumnos tendrán que "tomar consciencia de la lucha por una efectiva igualdad de género, y del problema de la violencia y explotación sobre las mujeres, a través del análisis de las diversas olas y corrientes del feminismo y de las medidas de prevención de la desigualdad, la violencia y la discriminación por razón de género y orientación sexual, mostrando igualmente conocimiento de los derechos LGTBIQ+ y reconociendo la necesidad de respetarlos”.

Según se recoge en la propia norma, se dinamizará "el uso crítico, responsable y sostenible de la tecnología, la valoración de las aportaciones y el impacto de la tecnología en la sociedad y en la sostenibilidad ambiental”. Otra novedad es que se deja totalmente de lado a la asignatura de religión, ya que las calificaciones obtenidas en esta materia no contarán ni para la nota media académica ni para aquellas convocatorias que la pidan, como es el caso de la solicitud de becas.

Críticas entre los padres y asociaciones de estudiantes

Desde la Federación de Enseñanza de Comisiones Obreras (CCOO), como no podía ser de otro modo, reciben la medida con alegría. "Nos parece mucho más ajustado con las necesidades de nuestra sociedad", señala Francisco García, secretario general de FECCOO, que también celebra que la evaluación sea más flexible y que sea el profesorado quien decida que un alumno repita curso. También UGT valora positivamente las propuestas introducidas, ya que según este sindicato van encaminadas a "lograr que los aprendizajes del alumno sean realmente significativos”.

Pero no todo son buenas palabras: En el caso de CSIF, su responsable en materia educativa, Mario Gutiérrez, critica que la nueva norma "en ningún caso mejora el sistema educativo". En este sentido, rechaza que el currículo sea más competencial porque, a su juicio, lo hace "a costa de los contenidos", señalando que dichas competencias "no se pueden alcanzar sin memorizar conceptos”.

CSIF también rechaza la promoción "automática" del alumnado así como la eliminación de los exámenes extraordinarios, ya que "va en contra de la igualdad de oportunidades al minusvalorar la titulación que se da en los centros públicos". "Esto permitirá abrir más nichos de negocio para la educación privada", subraya Gutiérrez.

Por parte de las asociaciones de padres y alumnos, la Confederación Católica Nacional de Padres de Familia y Padres de Alumnos (CONCAPA), valora "negativamente" el nuevo currículo, que "sigue sin apostar por la cultura del esfuerzo y del trabajo", posibilitando que los alumnos pasen de curso sin aprobar, según expone su presidente, Pedro Caballero, quien recuerda la oposición de la Confederación a la LOMLOE. "Las familias y maestros son los que saben de educación, no los políticos que promulgan leyes educativas infumables", sostiene.

CONCAPA: "Las familias y maestros son los que saben de educación, no los políticos que promulgan leyes educativas infumables"

Una reforma que critican también desde los colegios concertados: "En principio, consideramos que el nuevo currículo de ESO supone un descenso del nivel académico y de la exigencia respecto al nivel actual, y esto no es bueno para el sistema educativo", asegura Luis Centeno, secretario general adjunto de Escuelas Católicas, en referencia a los requisitos de promoción y titulación, que a su juicio pueden "favorecer una cultura del mínimo esfuerzo".

Los cambios llegan también a la primaria y FP

Antes de que en julio del año 2021 Pedro Sánchez decidiese cambiar la estructura de su Gobierno remodelando una gran parte de los ministerios socialistas, la exministra de Educación Isabel Celáa dejó preparada una nueva reforma de la ley de Educación en la que hay cambios para la Formación Profesional (FP) y la Educación Primaria.

Unos cambios que ahora han pasado a manos de la nueva ministra de Educación, Pilar Alegría, y que suponen otro mazazo a la libertad de educación de los padres según algunas organizaciones educativas. Por ejemplo, en Primaria, los alumnos cursarán Educación en Valores y también podrán tener Religión, pero el número de horas dedicadas a esta asignatura, al igual que en la ya mencionada ESO, se reduce 90 horas, con lo que se aumentan en otras, como Educación Artística (60 horas más); de Conocimiento del Medio (15 horas más); de Matemáticas (10 horas más); y Lengua Castellana y Literatura (5 horas más).

Por su parte, el currículo de Infantil se organiza en "áreas correspondientes a ámbitos propios de la experiencia y del desarrollo infantil", como son 'Crecimiento en armonía', 'Descubrimiento y exploración del entorno', y 'Comunicación y representación de la realidad', incorporando la idea de eliminar o evitar los "estereotipos sexistas" en la evaluación de varias de las competencias específicas que han de adquirir los alumnos durante la etapa. Estos cambio de Infantil y Primaria no llegarían hasta el próximo curso 2022-2023 para los cursos impares, y para el 2023-2024 para los pares.

En cuanto a la FP, 2022 también será el año en que se apruebe la Ley Orgánica de ordenación e integración de la Formación Profesional, que a partir de ahora será dual, es decir, se compatibilizarán los estudios con las prácticas en empresas.

Será de dos tipos: genérica cuando las prácticas en empresa representen entre el 25% y el 35% de la duración total de la formación y cuando la participación de la empresa en el currículo no supere el 20%; e intensiva las prácticas representarán más del 35% de la duración total de la formación, y la empresa participe en más del 30% de los contenidos. En este caso, las prácticas serán retribuidas a través de un contrato de formación.

tracking