Varapalo del Supremo a Dolores Delgado al anular sus "dedazos progresistas"
Los escándalos se le acumulan a la fiscal general. Ahora el Alto Tribunal revoca el nombramiento para la Fiscalía de Menores, vinculado a la asociación afín al PSOE de la exministra.
Dolores Delgado junto a Pedro Sánchez
Dolores Delgado sigue protagonizando polémica tras polémica. Y ya son cuatro en las últimas semanas. Primero fue el escándalo del caso Stampa -la purga del fiscal del caso Villarejo, Ignacio Stampa, que ya investigan los tribunales tras una denuncia de la Asociación de Fiscales-.
Después la polémica con la Fiscalía Europea por la persecución a la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. Más tarde, la artimaña de Moncloa para garantizarle un ascenso cuando abandone la Fiscalía General del Estado. Y, ahora, un mazazo sonrojante a manos del Tribunal Supremo.
La Sala de lo Contencioso-Administrativo del Alto Tribunal ha anulado el nombramiento de Eduardo Esteban Rincón como fiscal de Sala jefe de la Unidad Coordinadora de Menores al entender que se ha dado una falta de motivación para que Delgado le propusiera para el cargo. Una velada acusación de enchufismo, una constante de su salto del Gobierno al Ministerio Público.
La decisión llega después de que se presentaran dos recursos al respecto: el de la Asociación de Fiscales y el de uno de los aspirantes a ese puesto, el fiscal José Miguel de la Rosa.
La anulación de este nombramiento llega además con la acusación de “favoritismo” hacia Dolores Delgado, ya que la Asociación de Fiscales ha criticado públicamente la política de nombramientos de Delgado.
El pasado "progresista" de Dolores Delgado comienza a pasarle factura en sus decisiones en la FGE.
Porque “muestra sin disimulo querencia por los miembros de la Unión Progresista de Fiscales (UPF), asociación a la que perteneció”. La AF señala que Delgado realiza propuestas apoyándose en los votos de la APF “frente al principio de mérito y capacidad que debe regir en cada propuesta de nombramiento”.
La decisión del Supremo es por tanto un nuevo varapalo a la política de Dolores Delgado con los nombramientos en el Ministerio Fiscal. Y otra muestra de su parcialidad, ya conocida desde su salto de la Audiencia Nacional al Ministerio de Justicia, siempre bajo la sombra del exjuez Baltasar Garzón.
Un nuevo charco tras el intento del PSOE de la semana pasada de intentar colar un ascenso encubierto para Dolores Delgado en una enmienda de la Ley de Acompañamiento, o las desavenencias con la Fiscalía Europea por intentar controlar la investigación al contrato del hermano de Isabel Díaz Ayuso.