Almeida exigirá “hasta el último euro estafado" en la causa de las mascarillas

El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida ha explicado este jueves ante los medios de comunicación que el Ayuntamiento de Madrid desconocía que los intermediarios que suministraron algunos de los productos esenciales sanitarios durante los primeros meses de pandemia, estaban generando comisiones tan elevadas.

O eso es lo que ha explicado la Fiscalía Anticorrupción, que en su escrito recoge que los empresarios Luis Medina y Alberto Luceño cobraron comisiones por valor de casi 5 millones de euros. Estos empresarios, presuntamente, habrían conseguido mascarillas, guantes y test de antígenos que luego vendieron al Ayuntamiento de Madrid con márgenes de beneficios altísimos.

En esta presunta estafa, el alcalde de la capital ha insistido en que ni él ni nadie del ayuntamiento ha estado relacionado con esos empresarios y mucho menos se han beneficiado de las comisiones, por lo que ha anunciado que el consistorio se personará en la causa para “poder ejercer las acciones que correspondan” en defensa de los intereses públicos.

El alcalde ha insistido en que reclamarán hasta el último euro que se haya podido robar y ha negado rotundamente que haya existido "cualquier tipo de intermediación”. El popular ha explicado que un familiar suyo se limitó a dar la dirección de un buzón de correo electrónico del Ayuntamiento (que era público para la ciudadanía) a una conocida común con Luis Medina: "Ni directa ni indirectamente tuve relación”.

Un hecho, el dar la dirección de un correo electrónico público, que la izquierda del Ayuntamiento de Madrid ha querido usar para sacarle del consistorio "a cualquier costa”, según dice el propio Almeida: "Solo quieren triturar carne, hacer picadillo".

Por su parte, la vicealcaldesa de Ciudadanos, Begoña Villacís ha seguido esa misma línea y ha asegurado que el Ayuntamiento está siendo noticia por razones que no deberían serlo. “Ha habido gente que cuando se morían 300 madrileños al día, cuando el ayuntamiento no daba a basto para recoger cuerpos, cuando teníamos mucho miedo por lo que podría ocurrir, cuando estábamos desesperados por tener a la gente protegida, se han aprovechado de la desesperación de un ayuntamiento para comprar yates, relojes de lujo, pagar viviendas, costear fines de semana y coches caros”.

Unas actuaciones que son “indecentes e intolerables”, según sus propias palabras, y ha confirmado que no cederá ante las presiones de la izquierda, que exigen que rompa su pacto de gobierno con el Partido Popular. Villacís ha apoyado al equipo de gobierno y ha mostrado su sorpresa por esta presunta estafa. “Nos hemos ido enterando de las noticias por los medios”, ha dicho.