Muy jóvenes y captados en la cárcel: así son los nuevos yihadistas en España
Los nuevos activistas del islamismo más radical son veinteañeros y se forman, sobre todo, en las prisiones, según el último estudio realizado por expertos en terrorismo.
Se radicalizan más jóvenes y en un ambiente tan claustrofóbico y enfermizo como la cárcel. Así son los nuevos yihadistas en nuestro país y así se materializa su nueva amenaza, según el estudio más reciente sobre esta variante del terrorismo mundial en España.
En concreto, el perfil del yihadista en España según el análisis de los 39 detenidos en 22 operaciones policiales en 2021 refleja que baja la edad a entre 18-24 años y que uno de cada tres casos se registra en el ámbito de las prisiones. Destaca igualmente que el 45% era marroquí, así como la interconexión entre los arrestados, ya que uno de cada tres guardaba relación con otros detenidos por actividades terroristas.
Los datos se recogen en el 'Anuario del terrorismo yihadista 2021' publicado por el Observatorio Internacional de Estudios sobre Terrorismo (OIET), perteneciente a COVITE, que destaca el descenso de la edad de los detenidos respecto a años anteriores. La franja de edad más representativa se encuentra entre los 18 y los 24 años, mientras que el año anterior se situaba entre los 32 y los 38 años.
El informe subraya que los jóvenes detenidos tienen más presencia en el entorno online, así como la prevalencia de la nacionalidad marroquí (45%). "Los nacionales españoles parecen tener un rol esencial en procesos de radicalización que se están dando en las prisiones", añade la OIET, que cuenta para su estudio con el respaldo del Departamento de Seguridad Nacional y del Ministerio de Asuntos Exteriores, así como las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Otros datos del análisis del perfil del yihadista detenido en España en 2021 son que todos son varones, además de que el 56% son solteros, el 62% figuran como desempleados, en el 42% tienen antecedentes por delitos comunes o que en el 71% su adscripción ideológica era con el DAESH.
Además, de los 39 arrestados el año pasado, el 13% tenían relación con combatientes extranjeros. Los delitos imputados fueron enaltecimiento del terrorismo (32%), adoctrinamiento (26%) e integración en organización terrorista (21%).
El riesgo está entre rejas
Los principales focos siguen siendo las comunidades de Madrid y Cataluña, si se atiende al reparto geográfico de las detenciones de 2021, un año marcado por las siete operaciones de actividad yihadista en el interior de los centros penitenciarios.
"Los entornos penitenciarios se han convertido en uno de los principales espacios en cuanto a radicalización, proselitismo y captación se refiere. Que una de cada tres operaciones policiales frente al yihadismo se haya desarrollado en 2021 en estos lugares refleja por sí misma la intensidad con la que estos procesos se están dando, y el riesgo existente para la sociedad en el momento en el que alguna de estas personas radicalizadas pueda reincorporarse a la sociedad sin que su extremismo violento haya sido identificado previamente", recoge el informe.
La interconexión que existe entre aquellos que realizan labores yihadistas en España es otro elemento "también muy a tener en cuenta", según los expertos de la OIET, que cuenta en su dirección con Carlos Igualada. Una de cada tres personas detenidas en 2021 guardaba relación con otros arrestados por actividades terroristas, y cinco de ellos tenían un vínculo directo con combatientes terroristas extranjeros (CTE).
En la presentación del anuario de 2021, el director del Departamento de Seguridad Nacional, general Miguel Ángel Ballesteros, ha recordado que "no se puede bajar la guardia" ante el terrorismo yihadista, poniendo el foco en la zona del Sahel y también en la doble amenaza que representa el retorno de los combatientes extranjeros y los conocidos como 'actores solitarios' radicalizados en España.