El plan de Feijóo centrado en las familias obliga a Sánchez a retratarse
El presidente del PP ha presentado este miércoles ante la plana mayor del partido su propuesta económica que pasa por reducir la presión fiscal en las familias con menores ingresos.
Alberto Núñez Feijóo ya tiene claras las líneas maestras del plan contra la crisis que enviará previsiblemente este viernes al presidente del Gobierno. Tras reunirse con los agentes sociales, el presidente del PP ha convocado al Comité Ejecutivo Nacional del PP para exponer con más detalle su propuesta económica, "sólida y solvente", centrada en rebajas fiscales que supondrían un alivio para las rentas medias y bajas de este país.
Un plan en el que las principales beneficiadas serían las familias, asfixiadas por el aumento de los precios, lo que obligará a Sánchez a tener que explicar las razones por las que no apoya un plan que daría oxígeno a la ciudadanía y que ha sido redactada por un PP que ha efectuado un "cambio tranquilo y sereno", que se centra "en lo importante".
Feijóo remitirá a Moncloa la propuesta, con la esperanza de que algunas de las medidas sean incorporadas en el decreto que el Gobierno contra la crisis, pese a que el presidente ya ha mostrado su más absoluto rechazo a una bajada generalizada de impuestos, con la excusa de que la medida supondría una merma de la calidad de los servicios públicos.
Sin embargo, el plan de Feijóo no sigue esa senda, sino que lo que pretende es una bajada del impuesto de la renta "selectiva y temporal" con carácter retroactivo al mes de enero, teniendo en cuenta que el Gobierno ha recaudado 7.500 millones más en enero y febrero de este año con respecto al año anterior, algo que ha considerado "injusto" y que "los españoles no merecen".
De hecho, la medida se centrará en las rentas inferiores a 40.000 euros y consistirá en deflactar, es decir, aplicar a los tramos del IRPF la inflación, con el fin de evitar al contribuyente el pago de mayores impuestos y así corregir el efecto de la subida de precios que ha provocado una merma en el poder adquisitivo de las familias.
En su reunión en Moncloa con el presidente del Gobierno ya precisó que los cálculos del PP es que esa rebaja se estima entre "3.500 y 3.800 millones de euros", lo que no supondría una gran pérdida para las arcas del Estado, habida cuenta que gracias a esa inflación los ingresos fiscales crecieron en 7.500 millones.
Reducir el IVA de los suministros energéticos
El líder del PP también defiende agilizar las devoluciones para que los españoles puedan hacer frente a la inflación y reducir el IVA de la luz, del 10% al 4%, y del gas, del 21% al 4% y así poder reducir la factura ante el elevado coste de la energía.
Además, el presidente del PP quiere que los fondos europeos sirvan para agilizar la economía y no se ejecuten con tardanza. Por eso, propone que 4.900 millones de esos fondos puedan ser gestionados directamente por los ciudadanos, sin tramitación burocrática.
Para ello pretende que desde el Gobierno se articule un mecanismo para que los españoles pueda acceder al 7% de los fondos Next Generation para llevar a cabo proyectos de mejora de eficiencia energética.
Feijóo pedirá a Sánchez que reduzca el gasto público
También, Feijóo defiende reducir el gasto público del Gobierno, ya que los últimos informes publicados avalan que tiene un margen de 60.000 millones de euros, que es la cantidad que se despilfarra de forma ineficiente y que se podía gastar "sin afectar en la calidad de los servicios públicos", por lo que propone que la Airef realice una auditoria de los gastos superfluos del Ejecutivo y la remita a las Cámaras, según adelantó él mismo tras verse con Pedro Sánchez.
La patronal ya vio este martes con buenos ojos la propuesta de los populares, sin embargo, la posición de los sindicatos es bien distinta, ya que se han alineado con Sánchez a la hora de negarse a cualquier bajada de impuestos.
Según Unai Sordo (CCOO), España "no necesita una bajada generalizada de impuestos" sino un sistema fiscal "más justo, equitativo y ambicioso". De la misma manera, Pepe Álvarez (UGT) ha expresado su rechazo a la rebaja del IRPF de Feijóo pero ha dicho que esperará a leer su plan para hacer una valoración global porque incluye elementos que no conocía.
Pero el que tiene la última palabra es el presidente del Gobierno que tendrá que decidir si incorpora alguna de las medidas propuestas por Feijóo. Es decir, si prefiere mantener su política de ayudas y subvenciones que solo producen un mayor gasto para el Estado o si prefiere apostar por dar oxígeno a las familias reduciendo la recaudación de unos impuestos que no deja de subir por la inflación.