El relevo tranquilo de Alfonso Rueda: a “ampliar y mejorar” el legado de Feijóo

“Soy Alfonso Rueda y trabajaré para ampliar y mejorar el legado de estos años de gobierno”, con esta frase se ha presentado en estas últimas horas ante el parlamento gallego el nuevo presidente de la Xunta de Galicia, dispuesto a suceder a Alberto Núñez Feijóo tras 13 años de gobierno de este último desde la “normalidad y la tranquilidad”.

Un cambio tranquilo, sin exabruptos, pero en el que Galicia y el todopoderoso PP gallego ponen un punto y aparte y abren una nueva página de la historia de su autonomismo. Alfonso Rueda no es Feijóo, “ni tampoco pretendo serlo”, recalca el nuevo presidente. Simplemente aspira a que “Galicia siga siendo un referente de normalidad para marcar el rumbo del resto de España”

“No quiero ser presidente de la Xunta para fotocopiar las últimas páginas de nuestra historia, aunque estas fueron memorables. Quiero serlo para escribir entre todos algunas de nuestras mejores líneas de nuestro futuro”, subraya Alfonso Rueda en su discurso ante el parlamento de Galicia. “cambia uno de los caminantes, pero el camino continúa”, en referencia a la nueva etapa que se abre.

Feijóo abraza a su sucesor, en el pleno en el que el nuevo líder del PP nacional se despidió de Galicia.

Como primera propuesta, Alfonso Rueda, que se presenta con el aval de la gestión de haber sido el lugarteniente de Feijóo durante estos años en la Xunta, presentará una reforma fiscal para rebajar el IRPF a los gallegos. Una propuesta muy en la línea del nuevo PP de Feijóo como la que ha hecho en su plan económico, pues como dice Rueda “quiero seguir el ejemplo de un gallego ejemplar”.

Entre los retos del que será el nuevo presidente de Galicia tras el trámite de la votación de los diputados, Alfonso Rueda tiene ante si el objetivo de convertirse en un nuevo barón autonómico y lanzar su imagen hacia las próximas elecciones autonómicas del 2024 para que el PP gallego siga siendo esa máquina imparable de ganar que lo fue con Fraga y Feijóo, ese partido que más conecta con la forma de ser gallegas y ha sido el buque de contención de nacionalismos, populismos e independentismos en la región.

En el plano interno del partido, Alfonso Rueda deberá vencer las reticencias internas que quedan y calmar a quienes temen que tras Feijóo sea difícil superar su figura. No es un reto fácil, con barones provinciales con mucho peso, pero Rueda también acumula experiencia como secretario general del PP de Galicia y presidente del PP de Pontevedra. No es ajeno a la gestión interna del PP y a templar sus ánimos. Este miércoles comienza una nueva etapa en Galicia.