Iglesias sale en defensa de Bildu y llama “sabandijas” a los medios discrepantes

Nuevo ataque brutal de Pablo Iglesias a periodistas de medios de comunicación discrepantes con su ideología. Y en esta ocasión, la ofensiva ha sido monográfica, ya que le ha dedicado un programa entero a los periodistas que hacen preguntas incómodas o persistentes a los portavoces de los grupos parlamentarios en el Congreso.

Y es que este martes, la portavoz de Bildu, Mertxe Aizpurua, contestó con una sonrisa a Josué Cárdenas y Javier Negre que no iba a responder a ambos periodistas porque eran de la “ultraderecha mediática”. Poco después, la izquierda se movilizó compartiendo un vídeo en el que supuestamente Negre insulta a Aizpurua, aunque él ha negado que esto sea verdad, diciendo que se corta la grabación y que la misma ha sido modificada, por lo que tacha todo de “bulo”.

En cualquier caso, esta ha sido la justificación perfecta para Iglesias, que ha atacado como nunca a estos dos periodistas desde su podcast “La base”, diciendo que estos periodistas son “sabandijas sin escrúpulos” y que la portavoz de Bildu se limitó a no contestar “con notable elegancia”.

Además, Iglesias ha asegurado que las explicaciones de Negre no son valientes y que no responden a los “rancios valores del honor y la nobleza viril”. Además Iglesias ha llegado a hablar de violencia física para intentar ridiculizar a los periodistas: “Si alguna vez les regalaran una galleta maría (un golpe) ni siquiera tratarían de devolverla con hombría, pelo en pecho, cojones españoles y heroísmo ibérico, como el jamón. Por el contrario, irían llorando a una comisaría y subirían fotos vendados como el hombre invisible”.

Pero Iglesias ha ido más allá y ha llegado a acusar de delitos al exasesor de Santiago Abascal y ha llegado a justificar a medias la violencia física, o eso parece al leer sus palabras: “Tengo más respeto por escuadristas clásicos como Francisco Paula Méndez Monasterio, exasesor de Abascal o Ricardo Sáenz de Bestrilla que por estos. Estos dos últimos estuvieron dispuestos, al menos, a repartir hostias consagradas, aunque fuera en proporción de 20 contra 3 o a disparar a un camello que no quería venderle cocaína a Don Ricardo”.

Un ataque brutal que continuó con otro hacia los periodistas mencionados: “Por el contrario, las sabandijas que hoy nos ocupan lo único que disparan es bilis, mezclada con sarro y nacionalcatolicismo con olor a cerrado y a sobaco. Por eso para hacer política, se sacaron el carné de prensa”.