Gamarra le exige a Sánchez que aclare el siniestro espionaje de su móvil oficial
"Esperamos que el ministro Bolaños, citado a declarar, cuente la verdad que usted no está contando en esta Cámara", ha espetado la dirigente popular.
Más de dos meses después de que Sánchez iniciase sus "nuevas relaciones con Marruecos", tras su visita a Rabat, el presidente del Gobierno ha acudido al Congreso de los Diputados para explicar a la Cámara las razones del giro histórico de la posición española sobre el Sáhara, después de que el PP solicitase su comparecencia. Una tardanza que ha sido cuestionada por los populares que, en boca de Cuca Gamarra, han aprovechado su discurso para meter el dedo en la llaga y poner de manifiesto la debilidad de Sánchez y su soledad, una vez que tiene en contra a medio Consejo de Ministros y ha exigido al presidente explicaciones sobre la posible implicación de Marruecos en el espionaje con Pegasus.
Y es que, Sánchez había mezclado en su comparecencia dos cuestiones de "naturaleza diferente", como ha señalado Gamarra, por una lado la cuestion del Sáhara, -sobre la que ha dado cuentas "arrastrado por la oposición", ha dicho la portavoz popular-, y por otro las conclusiones adoptadas por el Consejo Europeo celebrado el 30 y 31 de mayo.
Pero también son dos cuestiones que han abierto en canal al Gobierno ya que Podemos se ha mostrado en contra, tanto del envío de armas a Ucrania como del cambio de posición respecto a Marruecos. Por ello, Gamarra ha pedido a Sánchez que "intente hacer política de Estado", aunque "haya metido a todos los enemigos de la nación".
"La pesadilla de gobernar con Podemos, Esquerra y Bildu es el día a día de esta legislatura", ha dicho la dirigente popular y el de este miércoles "es un capítulo más". De hecho, ha insistido en que "el Gobierno es una emboscada permanente a costa del crédito de España", ha asegurado, para añadir que "es el precio del colchón de la Moncloa".
"Cuenta con el PP para asfixiar a Putin"
Por ello, y para evitar el constante descrédito al que se está sometiendo a España por las divisiones en el Gobierno en política exterior, Gamarra ha ofrecido su apoyo sin fisuras. "Cuenta con nuestro respaldo para asfixiar a Putin", ha garantizado.
Pero eso sí, no ha escapado la oportunidad de recordar que Ucrania "le ha afeado su pasividad, y se lo han afeado otros países europeos", ha dicho la portavoz pues "empezó negando la ayuda militar, para luego enviar guantes y gel hidroalcoholico".
Así, una vez que Gamarra ha mostrado al PP como un partido de Estado dispuesto a apoyar al presidente en lo que se refiere a Ucrania, también ha recordado que "somos la oposición quienes deseamos más el éxito de la Cumbre de la OTAN que los socios del Gobierno". "Nosotros decimos que hay que apoyar a Ucrania, garantizar la protección de sus fronteras y los únicos que hemos ganantizado el apoyo para que Finlandia y Suecia entren en la OTAN", ha zanjado.
Gamarra sobre Marruecos: "No tiene el apoyo ni el mandato para cambiar la posición de España en esta cuestión. Ha venido arrastrado por la oposición. Le exigimos que vuelva a la posición de la ONU: una solución negociada entre las partes"
Por su parte también la portavoz del PP ha criticado la manera en la que ha actuado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en relación con Marruecos: "Vuelva a la neutralidad de la ONU y busque un acuerdo con todos". "Todavía no se ha creado la aduana comercial de Ceuta y la de Melilla sigue cerrada. Es un fracaso. Esa es la realidad", añade la diputada del PP.
De hecho, ha recordado que Sánchez "no tiene el apoyo ni el mandato para cambiar la posición de España en esta cuestión. Ha venido arrastrado por la oposición. Le exigimos que vuelva a la posición de la ONU: una solución negociada entre las partes. Exigimos que arregle el estropicio con las relaciones con Argelia que están afectando las relaciones comerciales con nuestro país", ha insistido Gamarra.
Además, ha puesto el acento en las dudas que genera este cambio de posición. "Seguimos sin conocer quién negoció la carta, quién la llevó al palacio de Marruecos. Tampoco ha aclarado si esto tiene que ver con el espionaje que sufrió usted. Esperamos que el ministro Bolaños, citado a declarar, cuente la verdad que usted no está contando en esta Cámara. ¿Si está citado a declarar no será que tiene alguna responsabilidad?", ha dicho.
Y es que, durante su comparecencia Sánchez ha dejado la mayor parte de estas preguntas sin resolver pues se ha centrado, una vez más, en asegurar que el plan de autonomía marroquí para el Sáhara es "la base más sólida, creíble y realista" para resolver el conflicto y así lo ven cada vez más países, entre los que ha citado a Francia, Estados Unidos y Alemania.
En este sentido, "47 años deberían ser suficientes para entender que tenemos que mover nuestras posiciones", ha sostenido el presidente dirigiéndose al resto de grupos, que han criticado el giro del Gobierno, defendiendo que lo que se busca no es otra cosa que favorecer el diálogo y la consecución de una solución mutuamente aceptable entre las partes auspiciada por la ONU.
Por otra parte, el presidente ha indicado que en su encuentro con el rey Mohamed VI el pasado 7 de abril dejó claro que España no acepta que "se hable de Ceuta y Melilla como ciudades ocupadas porque son territorio español". "La soberanía española sobre Ceuta y Melilla está fuera de toda duda como en cualquier otra parte del territorio nacional", ha recalcado.
Sánchez centra su discurso en el Consejo Europeo
Pero Sánchez ha dedicado gran parte de su discurso a otro asunto, el contenido del Consejo Europeo del 30 y 31 de mayo, el motivo por el que el presidente ha querido comparecer, para hablar de la guerra en Ucrania y sus consecuencias en la economía.
El presidente ha insistido en la "necesidad" de que la UE se centre en ayudar a Ucrania y en "seguir sosteniendo al gobierno ucraniano", al lo que ha añadido que "continuaremos prestando ayuda armamentística y hemos añadido 500 millones adicionales para el fondo para la paz".
Junto a ello, ha recordado que se ha "podido desbloquear el sexto paquete de sanciones contra Putin que amplía las personas afectadas, los bancos rusos sin acceso al sistema SWIFT, y las restricciones de importaciones de petroleo ruso que cierra parte del grifo económico que soporta la invasión rusa. Todos los europeos sabemos que estas respuestas tienen un coste pero que sería mayor no defender nuestros valores".
Así, se ha referido al plan anticrisis que el Gobierno ha puesto en marcha y que quiere prorrogar hasta septiembre, para lo que ha pedido el respaldo de la Cámara, dirigiéndose directamente a la oposición: "Espero que la oposición sepa estar a la altura y apoye el Gobierno para poder proteger a los ciudadanos de las consecuencias de la guerra de Putin", ha dicho Sánchez, que por otro lado, no está dispuesto a incluir ninguna de las propuestas del PP.
Al igual, ha pedido el respaldo del Congreso para dar vía libre a los límites del precio del gas. "España y Portugal conseguimos la excepción europea que será aprobada muy pronto. Estamos convcencidos de su aprobación lo que supondrá una rebaja de los precios entre 15% y 20% y que protegerá frente a crecientes subidas de precio. Entrará en vigor inmediatamente después de la aprobación europea y me gustaría pedir el apoyo de los grupos para esto", ha asegurado.
Además, ha lanzado un aviso a sus socios, a cuesta de la posición de Podemos sobre la cumbre de la OTAN: "La UE y la OTAN no rivalizan, sino que se complementan mutuamente", asegura el presidente del Gobierno. "La próxima cumbre de la OTAN vendrá muy bien para avanzar en este sentido", asegura. "Suecia y Finlandia saben bien de su importancia".
Pero como ha expresado Gamarra, en este punto Sánchez cada día está más solo. Sus socios le han abandonado y ahora está preso de sus pactos, pero prefiere seguir despreciando a una oposición constructiva que le tiende la mano en cuestiones vitales para mantener el prestigio de España en el exterior.