El guirigay del Gobierno con la OTAN se desata: "Es una amenaza para la paz"

La próxima Cumbre de la OTAN que se celebrará en Madrid a finales de este mes ha disparado la tensión en el Gobierno. Las posiciones entre socialistas y miembros de Unidas Podemos están enfrentadas, después de que Sánchez mostrase su compromiso internacional a enviar armas a Ucrania, y en medio de este lío Izquierda Unida, el partido del ministro de Consumo, Alberto Garzón, ha exigido la disolución de la Alianza Atlántica por considerarla una "amenaza para la paz".

De hecho, la plataforma estatal contra la Cumbre de la OTAN, ha difundido este martes un manifiesto en el que demanda la disolución de la Alianza Atlántica, rechaza el envió de armas a la guerra de Ucrania por parte del Ejecutivo y exige una reducción del gasto militar.

Es más, plantean que se reviertan los gastos armamentísticos para reforzar servicios públicos, como salud y educación, el fin de las bases militares de Rota y Morón, dedicar todos los esfuerzos a la vía diplomática en la guerra de Ucrania y promover un sistema de seguridad compartida y desmilitarizada.

Por tanto, apela a secundar la manifestación del día 26 para corear un 'OTAN No' y que será el colofón de una cumbre alternativa por la paz que arrancará el día 24, con una serie de foros para dar un cambio de paradigma basado en el desarme que se celebrarán en el auditorio Marcelino Camacho, de CCOO Madrid.

La plataforma, las organizaciones que las respaldan y gran parte de la estructura organizativa de IU han promovido en redes los actos de esta cita alternativa a la reunión de la OTAN y el texto unitario pactado, que acusa a la OTAN de ser una "amenaza para la paz", como ha demostrado a su juicio en otros conflictos como en Irak, Afganistan y la guerra en la antigua Yugoslavia. Así, expresan su rechazo a la invitación realizada por el Gobierno para realizar esta cumbre de la Alianza Atlántica en Madrid.

La plataforma argumenta que la Alianza Atlántica es uno de los "mayores impulsores de la carrera armamentística mundial" y tilda de "inaceptable" que el gasto mundial en armamento

"Es un sistema de seguridad multinacional que actúa en el escenario internacional infringiendo el mandato explícito de la Carta de las Naciones Unidas", ahonda el manifiesto de la plataforma que también califica de "inaceptable" el ataque de Rusia a Ucrania, lo que también contraviene las directrices de la ONU.

Para acabar con esta guerra, los colectivos firmantes del texto reclaman a España y a la Unión Europea que se "centren en la vía diplomática", al defender que el 'No a la guerra' que proclamó el país ante la guerra de Irak en 2003 "sigue siendo necesario más que nunca".

La plataforma argumenta, también, que la Alianza Atlántica es uno de los "mayores impulsores de la carrera armamentística mundial" y tilda de "inaceptable" que el gasto mundial en armamento se estimara durante 2019 en 1,63 billones de euros, la "cifra más alta desde la "Guerra Fría" entre Estados Unidos y la antigua Unión Soviética. También atribuye a la OTAN ser un obstáculo para la prohibición y destrucción de armas nucleares y de destrucción masiva.

Además, reprocha que España sea el séptimo país productor de armas a escala mundial, dado que esta escalada armamentística le "beneficia económicamente" y exigen aplicar un giro total con la reconversión de toda la industria militar española, unido a la cancelación de cualquier licencia de exportación de armamento vigente a países.

La dirección federal de IU y sus distintas federaciones, Anticapitalistas y organizaciones como Ecologistas en Acción Madrid, Marea Ciudadana, Solidaridad Obrera, Desarma Madrid, OTAN No Madrid, la coordinadora 25S, entre otros, ya han realizado un llamamiento a participar en esa marcha.

Pero si con esto, no fuera suficiente, las posiciones dentro de Unidas Podemos también son distintas, pues mientras IU pretende volver a los ochenta y llenar las calles a gritos de 'OTAN no', los morados aseguraron que no van a organizar ninguna contracumbre aunque muestran su respeto a esta movilización, al ser "un partido antimilitarista".

Así las cosas, Sánchez se encuentra con un medio Gobierno que no respalda las posiciones de España en la esfera internacional dejándole en evidencia delante de los principales líderes mundiales, en un momento especialmente delicado, pues a las tensiones con sus socios se suma la crisis diplimática con Argelia.

De hecho, el presidente busca hacerse un hueco en el núcleo duro de la OTAN y por ello, recibió al secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg, en los días previos a la celebración del 40 aniversario del ingreso de España en la organización, algo incompatible con la posición de sus socios, lo que socava credibilidad internacional ya que Sánchez no le pone freno.