Sánchez busca tapar la mala gestión del Gobierno con un decreto 'anticrisis'

Pedro Sánchez y el Gobierno han aprobado este sábado en un Consejo de Ministros extraordinario una serie de medidas anticrisis para hacer frente a la subida de la inflación y la guerra de Ucrania, que supondrán un gasto "superior a los 9.000 millones de euros", ha anunciado Sánchez. "Este nuevo decreto supone un esfuerzo extraordinario, superior a los 9.000 millones de euros, con 5.500 millones en gasto para proteger a familias y 3.600 millones en reducción de ingresos por las rebajas fiscales", ha asegurado y prometido Sánchez en rueda de prensa al término de la reunión.

Entre otras medidas, que estarán vigentes hasta el 31 de diciembre, se ha aprobado una ayuda directa de 200 euros para trabajadores, autónomos y desempleados con "bajos ingresos" que se podrá solicitar a partir del mes de julio, así como una rebaja del IVA en la factura de la luz del 10% al 5% o la prórroga del descuento de 20 céntimos por litro al precio de los carburantes.

Respecto a las rebajas en los abonos de transporte, medida incluida en este real decreto, Sánchez ha explicado que reducirá en un 50% el precio de los abonos de transporte mensuales expedidos por el Estado (por ejemplo, Renfe), y hasta un 30% el coste de los abonos emitidos por las comunidades autonómicas y entidades locales. No obstante, la medida no será inmediata, ya que entrará en vigor el próximo 1 de septiembre y estará activa hasta el 31 de diciembre.

Y es que, mientras que el pasado mes de mayo, la vicepresidenta Nadia Calviño, afirmaba en una entrevista concedida a 'El País' que España había dejado atrás el pico de inflación y que los precios comenzarían a desacelerarse "a partir del segundo semestre del año", parece que esa perspectiva se aleja, demostrando, de nuevo las erróneas previsiones del Ejecutivo.

Asimismo, el Gobierno presentará en "las próximas semanas" una proposición de Ley para diseñar un nuevo impuesto que gravará "los beneficios extraordinarios de las empresas energéticas", con el objetivo de que entre en vigor el 1 de enero de 2023.

Sánchez, para más autobombo, ha terminado reivindicando la tarea del Ejecutivo durante las sucesivas crisis a las que se ha enfrentado y la forma en que lo ha hecho. “Sabemos para quienes gobernamos, para las clases medias y trabajadoras. Y vamos a seguir esa hoja de ruta”, ha señalado, hablando abiertamente de que existen “poderes” que “golpean mucho a este gobierno”. “Este es un Gobierno autónomo que sabe a quien sirve”, ha intentado convencer durante la rueda de prensa.