La ONU señala a España por la matanza junto a la valla de Melilla
Las Naciones Unidas han asegurado que lo ocurrido es "inaceptable" pues se ha hecho "un uso excesivo de la fuerza" en ambos lados de la frontera.
"Inaceptable". Así ha calificado Naciones Unidas lo ocurrido en la valla de Melilla el pasado viernes cuando más de una veintena de personas fallecieron al intentar cruzar la alambrada fronteriza. Además, la organización ha señalado directamente a España por la tragedia, ya que tanto nuestro país como Marruecos han hecho un "uso excesivo de la fuerza".
El portavoz de la Secretaría General, Stéphane Dujarric, ha hecho alusión a la masacre durante una rueda de prensa, calificándolo de "inaceptable", "un término que ya hemos usado antes por lo muy impactados que estamos por las imágenes de la violencia que hemos visto en la frontera entre Marruecos y España, en el norte de África, durante el fin de semana. (...) Que, de nuevo, ha resultado en la muerte de docenas de seres humanos, de solicitantes de asilo, de migrantes", ha expresado Dujarric.
"Hemos visto el uso también de una fuerza excesiva por parte de las autoridades, que debe ser investigada porque es inaceptable", ha agregado el portavoz de la Secretaría General de la ONU, añadiendo que el uso desproporcionado de la fuerza se ha dado "en ambos lados de la frontera".
De esta forma, Dujarric ha recordado a los Estados que "tienen obligaciones" en virtud del Derecho Internacional y de los Derechos Humanos, y ha asegurado que Naciones Unidas les seguirá presionando para que respeten "lo que muchos de ellos acordaron en el Pacto Mundial sobre Migración". "Las personas que se desplazan tienen Derechos Humanos, y éstos deben ser respetados, y estamos viendo que con demasiada frecuencia no se respetan", ha agregado Dujarric.
De esta forma, la ONU ha puesto el foco no solo en Marruecos, en quién Sánchez descargó toda la responsabilidad, sino también en España, pues considera que ambos países están directamente implicados. Sin embargo, el presidente prefiere mantener su discurso, aunque ha matizado sus palabras del pasado viernes cuando declaró que el asalto masivo a la valla de Melilla se había resuelto "razonablemente bien" por parte de las autoridades marroquíes y ha asegurado que no había visto las imágenes: "Es evidente que yo lamento las muertes que se han producido en Nador", ha dicho.
Aun así, ha insistido en culpar a "las mafias que trafican con personas" y ha pedido ponerse también en la piel "de los policías heridos"."Tenemos que ser empáticos y ponernos en la piel de los migrantes que han sufrido y sus familias, pero también pido que nos pongamos en la piel de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad de España y los gendarmes", ha asegurado.
Junto a ello, también ha defendido el "derecho" de los ciudadanos de Ceuta y Melilla a tener sus fronteras "seguras", a poder "vivir con tranquilidad", y tener una migración "regular, ordenada" y no estar "al albur de ataques violentos", ya que, según ha recordado, "en estos últimos 12 meses se han intentado al menos 8 ataques a la ciudad autónoma de Melilla, ataques violentos", ha dicho.
Además, ha añadido que ya hay tres investigaciones abiertas para esclarecer los hechos. Una de ellas, ha dicho, en Marruecos, donde se ha imputado ya a 30 personas; otra en la Fiscalía española y una más en el Defensor del Pueblo. En este sentido, ha señalado que habrá "total colaboración" con estas instituciones para esclarecer los hechos.
No dará explicaciones hasta que se celebre el Debate del Estado de la Nación que tendrá lugar en julio diluyendo el asunto entre otras cuestiones vitales como la economía
Sin embargo, Sánchez tiene todas las miradas puestas en él tras la desastrosa gestión del asunto y su falta de empatía a la hora de abordarlo, pues no solo el PP ha pedido que comparezca, sino también ERC, Bildu, Más País-Equo, Compromís y el PDeCAT, aliados parlamentarios del Gobierno de coalición. Una petición que también lleva la firma de Junts, la CUP y el BNG.
Pero no parece probable que el presidente dé explicaciones de forma expresa, sino que será uno de los temas que se cuelen en el Debate del Estado de la Nación, como uno más de la larga lista de asuntos pendientes y así diluir su importancia, como ha hecho en muchas otras ocasiones.
"Celebraremos en julio el debate estado nación, imagino que será uno de los debates que saldrá y estoy dispuesto en ese debate a rendir cuentas sobre esta cuestión", ha asegurado Sánchez que intentará diluir la atención en otros muchos asuntos. Pero, de momento, la ONU ya le tiene en el punto de mira.