Ciudadanos entra en pánico ante el espejismo de Arrimadas: "Está vendiendo humo"
La líder y Edmundo Bal han chocado con la cruda realidad. Su reinvención "municipalista" ha topado con la deserción general de candidatos y los agujeros en las listas para las alcaldías.
Pedro Sánchez ha revolucionado la dirección del PSOE, Alberto Núñez Feijóo ha disparado al PP en las encuestas, Santiago Abascal prepara el Vox 3.0 para octubre y Podemos sigue pendiente de los pasos de Yolanda Díaz. ¿Y Ciudadanos?
Los grandes partidos se afanan en engrasar maquinarias y preparar estrategias con la vista puesta en las elecciones municipales de mayo mientras la cúpula naranja está entretenida en salvar los muebles del partido y sortear la amenazante quiebra definitiva tras los sucesivos varapalos brutales en las urnas de Madrid, Castilla y León y Andalucía.
Y según reconocen fuentes de la formación a ESdiario, el pánico se ha instalado entre muchos dirigentes ante la "lentitud" y el "discurso irreal" con los que el equipo de Inés Arrimadas afronta su proceso de "refundación" a vida o muerte.
Un pánico añadido a la cruda realidad. Pese a las palabras optimistas de Arrimadas cara a las municipales, las deserciones de cargos en los ayuntamientos son masivas y los primeros sondeos en la sede nacional confirman que será imposible completar listas a las urnas con ciertas garantías.
Y pese a esta cruda realidad, Arrimadas sigue -según estos dirigentes consultados- "vendiendo humo". En su última entrevista, esta misma semana, la líder de Cs aseguró que el proceso de refundación que ha puesto en marcha su partido para intentar la remontada electoral "no tiene precedentes en España".
Arrimadas sigue presumiendo -ajena a la demolición de su proyecto- de que el suyo es el partido "que más autocrítica ha hecho en España". "Llevamos dos años analizando las causas de la bajada, pero ya es hora de mirar al futuro", dice, incidiendo en que tienen la "obligación moral" de defender el espacio del centro político. "España no se puede permitir otra vez tener que elegir entre rojos y azules.
Para "reconectar" otra vez con los españoles y convencidos de que "sigue habiendo muchos que quieren una opción liberal de centro, reformista y moderna", Arrimadas defiende su estrategia para crear "una opción mucho más interesante y más sexi en términos electorales". "Tenemos que volver a ser ese partido que proclama sin complejos ideas valientes y necesarias que mucha gente piensa pero ningún partido se atreve a decir", se defiende..
Y preguntada si la refundación puede pasar por ella misma, replica: "En la refundación está en cuestión todo, todo menos una cosa: nuestros valores liberales y el espacio que representamos. Lo demás se puede renovar todo".
En la cúpula de Cs existe la convicción generalizada de que Arrimadas tendrá que sacrificarse para intentar salvar los restos del partido.
También recuerda que tanto ella como muchos de sus compañeros han rechazado "golosas ofertas de otros partidos", en referencia al PP.
"Si estamos aquí es porque nos lo creemos y somos luchadores", dice, desvelando que lo que les da "fuerza" es su determinación por no dejar sin opciones a quienes "no quieren elegir" entre "la versión empeorada de Zapatero -en referencia a Pedro Sánchez- o el Rajoy número dos", como llama al líder popular, Alberto Núñez Feijóo.