Sánchez moviliza a sus leales para frenar el ansia de protagonismo de Díaz
Con las encuestas en contra el presidente ya va a por todas. No solo carga contra la oposición sino que también quiere expulsar del tablero a su principal rival electoral, Yolanda Díaz
Ya no hay tregua. La precampaña se ha desatado y el miedo de Sánchez a salir de la Moncloa le ha empujado poner en pie de guerra todos su leales. No solo contra la oposición, de esa se encargó el mismo en el Senado este martes, sino también para frenar a Yolanda Díaz, la rival que le puede arrebatar escaños a su izquierda y que está inmersa en una enorme campaña promocional que le lleva a intentar monopolizar el protagonismo en el Gobierno.
La propuesta de la lideresa de la izquierda de topar los precios de algunos de los productos de la cesta de la compra ha vuelto a crear un nuevo cisma en el Consejo de Ministros, pero no por la medida en sí, que el ministro de Agricultura, Luis Planas, ya desechó, sino por el intento de Díaz de apoderarse del discurso del "gobierno de la gente" que quiere Sánchez para sí.
Es, en definitiva, una pelea fraticida para convencer a las clases medias y trabajadoras, como dice el presidente, de que en la izquierda está la solución a sus problemas cotidianos, que pasan por hacer frente a las facturas y a poder llegar a fin de mes.
Así, Sánchez ha lanzado a la ministra de Defensa, Margarita Robles, una de las que ha estado a su lado desde sus inicios como secretario general del PSOE, a cargar contra Díaz, a la que ha acusado de usurpar las competencias de Planas y además, de que "quiere patrimonializar" el estar con los más vulnerables.
"Cuando uno está en un órgano colegiado pues puede tener opiniones particulares, pero hay ministros que son los competentes, que son los que técnicamente saben todo y son los que tienen que tomar las decisiones", ha trasladado la ministra en una entrevista en Antena 3.
Margarita Robles desliza que Yolanda Díaz hace sus propuestas "para quedar bien" y critica que "quiera patrimonializar que está con los más vulnerables"
Robles ha criticado que la titular de Trabajo "quiera entrar en algo que no le corresponde" y, si bien no duda de que todos los ministros hacen sus propuestas con la mejor voluntad, le ha recordado que detrás de las propuestas hay "aspectos técnicos y económicos que hay que conocer". "No se puede decir ''qué se me ocurre a mí ahora que puede quedar bien", ha sentenciado.
Además, la ministra socialista ha censurado que "alguien quiera patrimonializar que está con los más vulnerables". "Con los que más lo necesitan estamos todos", le ha recriminado, una vez que Díaz se reúne este jueves con el director ejecutivo de Carrefour España, Alexandre de Palmas, para abordar su propuesta de topar el precio de alimentos básicos como el pan, la leche o los huevos, un encuentro al que ha asistido también el ministro de Consumo, Alberto Garzón.
De hecho, Díaz piensa seguir adelante con este asunto, y ninguneando a Planas, pues tiene previsto reunirse el próximo lunes con grandes distribuidoras y asociaciones de consumidores y usuarios para tratar de buscar un acuerdo que tope los precios de alimentos básicos.
"Nunca he hablado de una intervención de precios, sino de una medida diferente para un acuerdo entre distribuidoras y asociaciones de consumidores, al objeto de hacer algo completamente legal, que ya se ha hecho en Francia y ha funcionado", explicó este miércoles la titular de Trabajo ante la prensa.
Pero al margen de la idoneidad de la medida o no, lo cierto es que la presencia de Yolanda Díaz en el tablero de juego electoral parece que empieza a preocupar en Moncloa. Si Sánchez siempre ha visto a Sumar, la plataforma de Díaz, como una posible aliada para futuros pactos, ahora, el miedo a caer derrotado en las municipales y autonómicas, -aunque ella no se presente-, con una aplastante mayoría absoluta del PP, como ocurrió en Andalucía, le ha hecho cambiar su discurso, haciéndose más radical y así intentar pescar votos en el caladero podemita, cada vez más desencantado con el rumbo del partido.
Las elecciones de la primavera servirán para medir el pulso de cara a las generales, pero también para establecer el nuevo mapa político en el que el PP lleva la delantera según las encuestas. Sánchez lo sabe y quiere aprovechar todos los resortes que tiene a su alcance para imponer el mantra del 'gobierno de la gente'. Yolanda Díaz también lo quiere para sí y por ello, ya empieza la pelea.