Sánchez busca otro enfrentamiento cara a cara con Feijóo para frenar la sangría
El presidente ha solicitado la comparecencia en el Senado, donde confrontará, de nuevo, con el líder del PP, además de otra intervención en el Congreso de los Diputados.
Pedro Sánchez en el Senado
Pedro Sánchez quiere otro cuerpo a cuerpo con Alberto Núñez Feijóo. Por ello, ha solicitado comparecer a petición propia en las próximas fechas tanto en el Congreso como en el Senado, con la intención de volver a confrontar con el jefe de la oposición y así intentar frenar la sangría de votos que vaticinan las encuestas. La cita en la Cámara Alta se prevé el 18 de octubre, mientras que en el Congreso, podría ser el día 13.
El presidente ha argumentado que dicha comparecencia responde a su intención de dar cuenta acerca de la reunión del Consejo Europeo del 7 de octubre y para informar sobre las medidas económicas y sociales adoptadas por el Gobierno para dar respuesta a la crisis provocada por la guerra en Ucrania, aunque el trasfondo electoral le delata, pues sólo allí puede intercambiar 'golpes' con Feijóo como ya ocurrió en la comparecencia del pasado 6 de septiembre.
De hecho, el presidente, que se consideró a sí mismo 'vencedor' del último cara a cara con Feijóo que se celebró el pasado mes de septiembre, ya avisó de sus intenciones tras su comparecencia. "Habrá más debates, dado el resultado", aseguró Sánchez ante el plenario de los diputados, senadores y eurodiputados socialistas reunidos en el Congreso.
Y dicho y hecho, el presidente acudirá a las cámaras para dar cuenta de su gestión, pero también lo hará con la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado bajo el brazo, y los venderá como unas cuentas diseñadas para "proteger a la clase media y trabajadora, avanzar en justicia social y garantizar la prosperidad económica de España", tal y como ha asegurado en su cuenta de Twitter.
Junto a ello, también promocionará las últimas medidas aprobadas como la rebaja del 21 al 5% al IVA del gas desde este mes de octubre y su reforma fiscal que incluye beneficios fiscales para rentas bajas y su impuesto temporal 'de solidaridad' a riquezas netas superiores a los 3 millones de euros.
De esta manera, Sánchez intentará dar un golpe de efecto para frenar el declive que vaticinan las encuestas y que en los últimos días colocan a Feijóo por delante del PSOE. De hecho, la brecha es cada día más amplia y en algunos casos los socialistas se colocan por debajo de los 100 escaños, como es el caso de la encuesta que publicaba este domingo 'El Español', donde el PP obtendría hasta 131 diputados y el PSOE 93.
Por su parte, el sondeo elaborado por Sigma Dos para el diario El Mundo era aún más favorable a los 'populares' pues podrían llegar hasta 138 escaños y los socialistas 102, con 36 diputados de diferencia. De hecho, hasta 'El País' reconoce ya la superioridad de Feijóo, en su encuesta de 40dB, donde podría sacar 21 diputados de ventaja a Sánchez y, de celebrarse hoy las elecciones generales, obtendría 124 diputados frente a los 103 de los socialistas.
Así las cosas, Sánchez necesita un vuelco electoral como sea. En primer lugar, las elecciones autonómicas están a la vuelta de la esquina y sus barones están en pie de guerra pues consideran que el presidente supone un lastre y más en medio de una batalla fiscal, en la que Ximo Puig se desmarcó de Ferraz con una bajada de impuestos y obligó a Moncloa a presentar su reforma.
Por ello, ahora el presidente quiere cerrar filas y que todos vuelvan al redil, mostrando de nuevo su discurso de que el Gobierno apoya a la "clase media y trabajadora" sin fisuras e intentando desmontar a un Feijóo que cada día cuenta con más apoyos.
