Desquite del Rey: el 12-0 rescata a Felipe VI del ninguneo y acoso del Gobierno
Los ciudadanos vuelven a dar una mayoritaria muestra de afecto y cariño al Monarca. Pero en el ámbito institucional, el mismo "páramo" provocado por Frankenstein.
Es posible que este miércoles, en su obligado recorrido por los distintos corrillos de la recepción institucional del Palacio Real, Felipe VI haya reflexionado que solo el fin de la pandemia ha hecho distinto este 12-O. Por que ha permitido una audiencia sin restricciones. Pero en el ámbito institucional y constitucional, el mismo páramo que en las ocasiones anteriores desde la llegada de Pedro Sánchez y la coalición Frankenstein a La Moncloa.
Que el Rey está solo es cosa sabida. Aislado, ninguneado por el Gobierno, plantado por Urkullu y Aragonés -los dos socios preferentes del presidente-, acosado por el resto de sus aliados y usurpado por Sánchez en la agenda internacional, de la que el líder del PSOE ha hecho su leit motiv de la recta final de su legislatura.
El Monarca ha vuelto a comprobar en el Palacio Real la gravedad de la crisis institucional provocada por 'Frankenstein'. Lo habrá hecho al ver la silla vacía del tercer poder del Estado
Ni siquiera este miércoles de fiesta grande de España ha podido sacar pecho el Jefe del Estado. Todos los socios de Moncloa hacen causa común para criminalizar la Hispanidad que este miércoles se celebra, en línea con sus socios populistas iberoamericanos. Lo sabe bien Felipe VI tras el bochornoso episodio de agit prop de Podemos tras el affaire en Colombia con la espada de Bolívar.
Más aún, el Monarca ha vuelto a comprobar en el Palacio Real la gravedad de la crisis institucional provocada por Frankenstein. Lo habrá hecho al ver la silla vacía del tercer poder del Estado, el Judicial. O al saludar a la nueva presidenta de RTVE, que lo es gracias a la última cacicada del Ejecutivo burlando a las Cortes Generales.
El Rey sigue recibiendo multitudinarias muestras de afecto y cariño cada vez que sale de Zarzuela.
Pero, además, Felipe VI sale de este 12-0, una de los símbolos que mayor visibilidad da a la Corona, tan en precario en lo institucional como estaba. se niega a articular una Ley de la Corona que sirva para poner pie en pared a linchamiento de sus socios a Rey.
En el desfile, a través de los ciudadanos; y en la recepción, gracias a la sociedad civil, Felipe VI ha vuelto a percibir que una grandísima mayoría de españoles le sigue considerando su gran referente
Con su presupuesto -austero ya de por sí- congelado por Sánchez por tercer año consecutivo. Y con la anomalía vigente del destierro de Juan Carlos I, despejado además su horizonte judicial. El Rey está, sigue, más solo que nunca.
Aunque Sánchez y sus costaleros ha podido comprobar este miércoles que eso es completamente falso. En el desfile, a través de los ciudadanos de a pie, y en la recepción, gracias a la sociedad civil, Felipe VI ha vuelto a percibir que una grandísima mayoría de españoles le sigue considerando el gran referente de la unidad, la concordia y la modernidad de España. Tal vez el único …