Sánchez despeja su futuro en el "zoco" de los PGE con otra tanda de hipotecas
El habitual paripé de los socios de Moncloa acaba como siempre. ERC, Bildu y PNV rescatan al presidente y le prestan su salvoconducto para agotar la legislatura. Pero la factura engorda.
Pedro Sánchez se ha visto obligado de nuevo a hacer encaje de bolillos con los PGE.
El guión se ha repetido por tercer año consecutivo. Tras amagar, Esquerra y Bildu y PNV han decidido no dar.
Tras este habitual postureo de la coalición Frankenstein, el proyecto de Presupuestos Generales del Estado camina desde este viernes rumbo a su tramitación parlamentaria sin el demoledor golpe de efecto que hubiera tenido para el futuro de Pedro Sánchez que alguna enmienda a la totalidad de los tres socios preferentes del gobierno hubiera tumbado las cuentas de María Jesús Montero.
La reforma de la sedición, el vaciado definitivo de las cárceles y más infraestructuras para el PNV. La hipoteca a cambio de que Frankenstein haya 'indultado' los presupuestos de 2023.
Eso sí, las negociaciones de última hora para evitar el sonrojo a Moncloa incorporan un colosal catálogo de cesiones al independentismo vasco y catalán y de hipotecas para el futuro. Una losa que amenaza a una hoja de ruta económica para el inquietante 2023, que ya ha recibido antes de nacer el rejón de muerte del Banco de España, la AIREF, la CEOE o el prestigioso servicio de estudios del BBVA.
La extrema debilidad de Sánchez, la guerra permanente entre PSOE y Podemos y la cercanía de las elecciones municipales y autonómicas ha encarecido notablemente la factura de los PGE para Moncloa.
A falta de que se conozcan las enmiendas parciales, ERC se anota un preocupante éxito: la puerta abierta a la reforma del delito de sedición, a la vez que una remesa de miles de millones de euros que convierten a Cataluña en la comunidad más beneficiada el próximo ejercicio.
Rufián y Otegi han vuelto a demostrar este viernes que en sus manos está Sánchez cada día.
Bildu ha logrado también que se culmine prácticamente el vaciado de las cárceles de presos de ETA, incluso la de aquellos autores de crímenes sin resolver definitivamente. Pero su gran éxito en este zoco de Sánchez es la controvertida Ley de Memoria Democrática.
El PNV, siempre más práctico y con mucha más experiencia en estas negociaciones, se lleva para el País Vasco un acuerdo para revitalizar el Cupo, la base del Concierto Vasco, y un nuevo paquete de infraestructuras, como las anheladas cercanías ferroviarias, que llevan aparejadas un buen paquete de inversiones millonarias.
Sobre la bocina, el PNV se anota una nueva mejora del Cupo vasco, las cercanías ferroviarias y un paquete millonario de infraestructuras
Superado este primer obstáculo y efectuado el pago del primer plazo, Sánchez abrirá la próxima semana este particular rastro a los socios menores, a la caza de las migajas que dejan Gabriel Rufián, Mertxe Aizpurúa y Aitor Esteban.
Ahí tendrán que pelear los canarios de Ana Oramas, el PRC de Miguel Ángel Revilla, el Compromís de Joan Baldoví y el Teruel Existe de Tomás Guitarte. Porque en la plaza de abastos del sanchismo todo se compra y se vende.
