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Sánchez usa el día de la Constitución para atacar al PP tras años de cesiones

El líder del Ejecutivo ha usado el acto institucional para recriminar a los populares el no haber cedido la renovación del CGPJ, omitiendo las cesiones del PSOE a los separatistas

Pedro Sánchez en rueda de prensa antes del acto institucional por el 6-D

Publicado por
Miguel Centeno

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La carrera de San Jerónimo se ha llenado este martes de autoridades del Estado y figuras políticas para celebrar el 44º aniversario de la Constitución Española. Un día gris, con nubes y con amenaza de lluvia sobre Madrid. Con los leones del Congreso presencia los discursos del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la presidenta de la Cámara Baja, Meritxell Batet.

Una celebración que llega después de semanas de constante crispación por parte de la izquierda y extrema izquierda, con acusaciones desde la parte morada del Gobierno, en concreto de la ministra de Igualdad, Irene Montero, hacia el Partido Popular, tachándolo de fomentar “la cultura de la violación”. Ni una mención o condena a esas palabras por Batet.

Tampoco han habido menciones, como era de esperar, a las cesiones del Gobierno ante los independentistas, la supresión del delito de sedición a cambio de los apoyos de Esquerra Republicana a los Presupuestos Generales, o el acercamiento de presos de ETA a cárceles vascas. Todo ello ha quedado bajo la alfombra del discurso socialista.

El acto empezaba con el izado de la bandera en el Congreso, por primera vez después de años en los que este acto se realizaba en la madrileña plaza de Colón. Poco después, sería el discurso de la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, el que continuaría el acto: “Celebrar la Constitución es celebrar la constitución de nuestra comunidad política. 44 años de paz, libertad, convivencia y progreso por el que ha transitado nuestro país de manera segura. Si hubiera sido el miedo lo que hubiera medido la redacción de la Constitución, habría sido un texto prolijo. La materia política de la Constitución es la esperanza. La esperanza de establecer una sociedad democrática y avanzada”, ha señalado al principio de su discurso.

“En la Constitución se legitima la democracia, el control de los tribunales, la distribución del territorio en su estado social, autonómico y de derecho, junto a los derechos y deberes de los ciudadanos. Es la identidad de nuestra política. A lo largo de las cuatro décadas, los logros de España han sido magníficos. Durante más de 30 años nuestro país lidera el número de órganos donados, reflejando la fortaleza del sistema de salud español. Eso es Constitución. Muchas personas voluntarias comparten con sus ciudadanos su tiempo. Eso es Constitución. Los dos jóvenes que fueron educados en el sistema español, ahora están en la agencia espacial europea. Eso es Constitución”, ha añadido Batet.

“Los deberes de la Constitución nos exigen máxima responsabilidad. Las instituciones ganan prestigio por lo que hacen y por lo que con ellas hacemos. Desdeñar el ahora en las instituciones puede comprometer el mañana. Las Constituciones se van haciendo con el tiempo. Son obra de la generación constituyentes, pero somos las generaciones que hemos vivido bajo su vivencia, las que debemos reconocernos en ellas. Nuestros abuelos tuvieron un sueño y nosotros lo estamos viviendo”, ha señalado Batet, al tiempo que lanzaba un dardo al PP por la renovación del CGPJ y no ceder.

Unos ataques al PP que Pedro Sánchez continuó, apelando a la Carta Magna para que los populares cedan ante el bloqueo socialista del CGPJ: “Hago un llamamiento más a la responsabilidad de los partidos conservadores de la oposición para que cumplan con sus obligaciones constitucionales. Mientras no lo hagan, no van a poder dar ninguna lección de constitucionalismo”.

A ello, Sánchez ha sumado unas palabras de “victimización” y ataque a la derecha señalando que este día coincide con una campaña de crispación de PP y Vox: “Pese al ruido y la crispación de aquellos que no tienen nada que ofrecer a los españoles, España sigue avanzando. Somos el país que más crece de la UE, con una tasa de empleo que no teníamos hace 15 años”.

Ni Sánchez ni Batet han hecho mención a las cinco sentencias del Tribunal Constitucional en contra de decisiones de Moncloa, como por ejemplo el decreto de Estado de Alarma del 2020 que recogía el confinamiento obligatorio por la crisis sanitaria del coronavirus. Sonadas ausencias en el discurso institucional del Gobierno.

Ausencias también por parte de Vox. El partido de Santiago Abascal ha decidido no acudir a los actos de este martes en el Congreso como forma de protesta contra el Gobierno de Sánchez y los pactos que éste ha tenido con los independentistas reformando el delito de sedición. Unicamente se ha acercado a la carrera de San Jerónimo el portavoz de Vox en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros, quien ha denunciado que este día está marcado por la “indignidad” de Sánchez, que mancha la Constitución.

Otras ausencias destacadas han sido la de los grupos separatistas de Esquerra Republicana, PNV, Bildu, Junts, la CUP y el BNG, que han decidido, como viene siendo habitual, no asistir a los actos institucionales como signo de “protesta”, dicen, ante el Estado “opresor”. Tampoco han acudido los presidentes autonómicos de Cataluña, Pere Aragonés (ERC), ni del País Vasco (PNV), Íñigo Urkullu, por motivos similares.

Unidas Podemos redobla sus ataques al PP y da un “palo” al PSOE

Por parte de Unidas Podemos, Javier Sánchez, ha acusado de "falsos constitucionalistas" a PP y Vox, que "pisotean" sus preceptos desde su "radicalidad", y ha apelado al PSOE a reaccionar para cambiar el sistema de mayorías para renovar el Consejo General del Poder Judicial, porque los "cantos de sirena" de acuerdos con la oposición han acabado.

En declaraciones a los medios el coportavoz del partido morado, Javier Sánchez Serna, ha incidido en que ya se han cumplido cuatro años del "secuestro" del Poder Judicial por parte del PP de manera “sediciosa". Es más, ha calificado de "insulto" que los populares celebren el aniversario de la Constitución cuando se niega a renovar el órgano de gobierno de los jueces, impidiendo que el CGPJ refleje la mayoría plurinacional del Congreso en este organismo. Una actitud que, a su juicio, supone "arrojar" al suelo el texto constitucional y “pisotearla".