Junqueras exprime más a Sánchez y coloca el referéndum en la 'mesa de diálogo'

ERC tiene la sartén por el mango. Era una especie de secreto a voces que este mismo martes ha verbalizado el portavoz de Unidas Podemos, Jaume Asens, al asegurar que las "prisas" por aprobar cuanto antes la modificación de los delitos de malversación y sedición "tiene que ver con una exigencia de ERC, tiene que ver con unos Presupuestos y con que llegamos a finales de año y se quieren cerrar muchas carpetas".

Por ello, las cartas ya están sobre la mesa y el independentismo tiene clara su hoja de ruta. Una vez que ya ha conseguido acabar con las trabas penales y jurídicas y, por tanto, ha logrado una 'amnistía encubierta', es el turno del referéndum.

La portavoz de ERC, Marta Vilalta, ha abogado hoy por abordar en la mesa de diálogo entre la Generalitat y el Gobierno un acuerdo para celebrar un referéndum de independencia. Un asunto que figura en la ponencia política de los republicanos como un "acuerdo de claridad".

"Hasta ahora hemos priorizado la cuestión antirepresiva básicamente para situarnos en una posición de igualdad o de más igualdad para poder negociar", ha explicado en una entrevista en TV3, por lo que el siguiente paso es hacer una llamada masiva a las urnas para lograr la independencia.

Junqueras: "Todas las vías que permitan que la ciudadanía pueda decidir sobre su futuro, votando respetando los derechos humanos y las libertades fundamentales es evidente que es una vía democrática"

Por ello, mientras desde la Generalitat se trataba de dar encaje a las negociaciones con Pedro Sánchez, el líder de ERC, Oriol Junqueras, mostraba su plan en una entrevista en RTVE, donde se ratificaba en que el 1-O no fue un delito y ha alegado que "organizar un referéndum no está en el Código Penal".

En su opinión, la vía unilateral es una vía democrática porque permite votar a la ciudadanía y decidir sobre su futuro, por lo que si no lo consiguen a través de la 'mesa de diálogo' están dispuestos ha hacerlo posteriormente, cuando gracias a la reforma de Sánchez, Junqueras pueda presentarse a las elecciones y convocarlo si es presidente.

De hecho, ante la insistencia de la entrevistadora al preguntar si "la vía unilateral es una vía democrática o no", Oriol Junqueras ha respondido: "Todas las vías que permitan que la ciudadanía pueda decidir sobre su futuro, votando respetando los derechos humanos y las libertades fundamentales es evidente que es una vía democrática", obviando la propia Constitución.

El dirigente independentista ha sostenido que las grandes cuestiones políticas "requieren multilateralidad", si bien ha señalado que tienen elementos de unilateralidad. "Nosotros defendemos la vía de la negociación y el reconocimiento internacional", ha reivindicado, dando por bueno el hecho de llevar ante Moncloa la posibilidad del referéndum.

Mientras tanto, el ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños, hacía su correspondiente papel respondiendo a Junqueras que no se va a celebrar un referéndum "ni por la vía pactada ni por la vía unilateral" porque es contrario a la Constitución y supondría "cronificar" el conflicto.

Las cesiones superan otro trámite en el Congreso

Pero lo decía al mismo tiempo que el PSOE daba luz verde en la Comisión de Justicia del Congreso a la proposición de ley que suprime el delito de sedición y que incluye una reforma del delito de malversación pactada con ERC. El texto ha salido adelante con 19 votos a favor de socialistas, 'morados', ERC y PNV frente a los 17 en contra de PP, Vox, Cs, Junts y CUP, mientras que Bildu ha optado por abstenerse.

En su turno de palabra, el portavoz de Justicia del PP, Luis Santamaría, ha señalado que con estas modificaciones, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pasará a la historia por "deconstruir España" y por "demoler el pacto de la Transición", además de por tender "un puente de plata" a Junqueras para ser candidato a la Generalitat y por contribuir a que cada vez esté más cerca la celebración de un referéndum por la independencia de Cataluña.

Asimismo, ha denunciado la tramitación atropellada de la proposición de ley y ha asegurado que el Grupo Socialista busca "legislar a la carta" sirviendo al interés de unos pocos y no de la mayoría. Por eso, y ante lo que ha calificado de "fraude de ley" y "disparate" ha anunciado que presentarán los recursos pertinentes por la vía judicial para frenar estas reformas impulsadas por un presidente al que ha llegado a tachar de "autoritario".

En un tono más duro aún se ha pronunciado el portavoz de Vox, Javier Ortega Smith, quien ha apuntado que se vive "un golpe de estado institucional" y que con la supresión de la sedición y la rebaja de la malversación "solo favorecerán a los que con violencia e intimidación llevan décadas intentando romper la unidad de España".

Además, ha denunciado que la tramitación de esta proposición se ha realizado con fraude procesal y reglamentario, "con inusitada prisa y con alevosía y nocturnidad", y ha avanzado igual que el PP que presentarán batalla judicial para frenar estas modificaciones del Código Penal.