Yolanda Díaz marca distancia y pide a Sánchez esperar a que el TC se explique
La vicepresidenta segunda vuelve a jugar la baza de la presunta moderación y huye de la confrontación con el Poder Judicial. Aún más, trata de refrenar las ansias de Sánchez y Belarra.
Una vez más, y van ya unas cuantas polémicas, Yolanda Díaz trata de flotar sobre el gran charco en el que su Gobierno ha convertido la política española y las principales instituciones del Estado. Y en la batalla cruenta entre Moncloa y el Tribunal Constitucional, la líder de Sumar vuelve a jugar la baza de la moderación. La de ponerse una vez más de perfil y marcar distancias con Unidas Podemos y, también, con el propio Pedro Sánchez.
La vicepresidenta segunda ha aconsejado esperar al auto del TC que suspende la tramitación parlamentaria de su reforma para, tras analizar su contenido, presentar una nueva proposición de ley en el Congreso para desbloquear su renovación.
Así lo ha trasladado a los medios de comunicación en los pasillos del Congreso, preguntada por la intención del PSOE de registrar una nueva iniciativa legislativa de forma inmediata -y sin esperar al tribunal de garantías-, con apoyo de grupos del bloque de investidura, que incluya el espíritu de las dos enmiendas suspendidas por el TC.
"Nosotros vamos a esperar que se dicte el auto del Constitucional y cuando el tribunal dicte su auto, después presentaremos la proposición de ley. Entiendan que tenemos que conocer el auto", ha explicado Díaz, quien recalca que es posible completar la tramitación de esa nueva iniciativa en un mes a partir del momento en que se registre.
Y es que fuentes parlamentarias indicaron que la futura proposición de ley se hará mediante la tramitación urgente y para ello ya han hablado con varios grupos que han censurado la decisión del Constitucional para que se sumen a la iniciativa.
Pedro Sánchez, junto a Calviño y Díaz este miércoles en el Congreso.
Mucho más radical que la moderada Díaz, la ministra de Igualdad, Irene Montero, ha criticado que la "democracia ha recibido un duro golpe" después de que, a instancias de la derecha, se haya paralizado por primera vez una "votación legítima" que iba a tener el poder legislativo en el Senado. Y a su juicio esto implica que la derecha "judicial y política" es "capaz de todo" para conseguir en otras instancias lo que no ha ganado en las urnas.
Ante ello, ha recomendado actuar con "serenidad" pero con "mucha firmeza" y que a los "demócratas" les toca "acabar de una vez con el bloqueo del TC y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ" de forma "inmediata".
Este martes, Unidas Podemos se reunió con aliados parlamentarios para conformar un frente común parlamentario para desbloquear la renovación del TC, aunque también cree necesario, sin presionar al PSOE, auspiciar otra iniciativa específica para rebajar las mayorías para elegir nuevos vocales del Consejo General del Poder Judicial.
"Frankenstein": sin leer al TC pero tramitar en enero
Mientras, el PSOE y sus aliados parlamentarios mantienen su intención de registrar esta semana la proposición de ley que recupere las enmiendas vetadas por el Tribunal Constitucional para reformar el sistema de elección de sus magistrados, pero en todo caso ya dejarán para el mes de enero los debates y votaciones para aprobarla.
Este martes, fuentes parlamentarias trasladaron la intención del PSOE de registrar esta misma semana una proposición de ley en el Congreso que incluya el espíritu de las dos enmiendas suspendidas por el Tribunal Constitucional para su propia renovación. Sin esperar al argumento de fondo de la mayoría de los magistrados ni los votos particulares de los cinco del sector progresista.