Irene Montero confirma la ruptura total con sus socios del PSOE: "No hablamos"

Era más que evidente pero ya ni los propios protagonistas lo esconden. La ley del solo sí es sí, de la que tanto presumían tras su aprobación, ha provocado un terremoto que ha sacudido los cimientos, ya maltrechos por otros asuntos, de la coalición entre PSOE y Podemos. La reforma de la norma presentada de manera unilateral por los socialistas ha provocado que la distancia entre ambos socios políticos se convierta en un abismo.

Así lo ha confirmado hoy una de las actrices principales en toda esta película: Irene Montero. En una entrevista en la Cadena SER, ha confirmado que desde que el PSOE presentó en solitario su propuesta de reforma no han hablado ni negociado nada más. La ministra de Igualdad ha culpado de esta falta de comunicación a sus colegas socialistas asegurando que ellas "nunca se han levantado de la mesa de negociación".

La ministra de Justicia, Pilar Llop, ha afirmado esta semana que se está confundiendo a la opinión pública con el tema del consentimiento y el denominado calvario probatorio (que la víctima tenga que demostrar la violencia en las agresiones sexuales). En cuanto a ello, Montero ha afirmado que no se está confundiendo a nadie, si no que se trata de una discrepancia política.

La encargada de Igualdad ha asegurado que ellas han hecho hasta 6 propuestas que concuerdan con lo que les pedía el PSOE para ir juntos en la reforma. Sin embargo, los socialistas no lo vieron claro y consideraron que las negociaciones habían llegado a un punto muerto y se habían encallados. Fue entonces cuando decidieron que, ante lo que ellos llaman "efectos indeseados" (463 rebajas de condenas a agresores sexuales) debían actuar, especialmente con la presión tanto política como social que estaban recibiendo.

Irene Montero ha vuelto a incidir en que nadie se esperaba la rebaja de condenas, pero porque no esperaban que los jueces aplicaran, según ella, mal la ley. De hecho, ha echado más leña al fuego afirmando que los ministros socialistas que ahora se quejan de esas rebajas no lo hicieron entonces porque tampoco sabían lo que iba a suceder.

La mecha está encendida, desde hace ya semanas, y cada vez es más corta. La relación entre los socios de coalición está en un momento muy tenso y que podría romperse en cualquier momento. Todo ello en un año clave, con las elecciones autonómicas y municipales a la vuelta de la esquina y las generales posiblemente a final de año. A pesar de todo y aunque ellos saben que no es lo mejor en año electoral, la pelea ha comenzado y ya no lo esconden.