Sánchez ofrece las cabezas de Renfe para sofocar el escándalo de los trenes
Dimiten el presidente de la compañía y la secretaria de Estado de Transportes tras el ‘caso de los trenes’ en Cantabria y Asturias y la revuelta de los presidentes que amenazaba a Moncloa
El ‘caso de los trenes’ de Asturias y Cantabria, que no cabían por los túneles por los que debían circular, provocando la respuesta airada de ambos gobiernos autonómicos que dirigen el socialista Adrián Barbón y el regionalista Miguel Ángel Revilla -en coalición con el PSOE- ha obligado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a entregar la cabeza de los máximos responsables de Renfe para sofocar un escándalo que amenazaba a Moncloa a cinco meses de las elecciones autonómicas y municipales.
En concreto, la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, ha aceptado la dimisión del presidente de Renfe, Isaías Taboas, y de la secretaria de Estado del Ministerio de Transportes y anterior presidenta de Adif, Isabel Pardo de Vera, por los errores cometidos en los trenes de Asturias y Cantabria.
Precisamente esta tarde está prevista una reunión entre la ministra de Transportes y los presidentes de Asturias y Cantabria, Adrián Barbón y Miguel Ángel Revilla. Ambos presidentes regionales habían alzado el tono de sus críticas exigiendo responsabilidades por lo sucedido, con el temor de que les pasara factura el próximo 28 de mayo en las urnas.
El socialista Adrián Barbón señalaba antes de las dimisiones que siente "ridículo" y que no está dispuesto a "comprar cualquier plazo" para tener funcionando los trenes. Revilla por su parte pedía soluciones urgentes ante los trenes que no caben en los túneles: "Es una chapuza impresentable".