El nuevo 'pufo' de la ministra Llop: deja sin poder casarse a los valencianos

La huelga de los Letrados de la Administración de Justicia, que se mantiene como indefinida y ya va por su quinta semana hasta que el Ministerio de Justicia que dirige Pilar Llop “dé un cumplimiento efectivo a los acuerdos suscritos en abril de 2022”, está teniendo víctimas colaterales como las parejas de novios que desean casarse en Valencia.

En concreto, los servicios mínimos en el registro civil de Valencia mientras dure la huelga de letrados son: fes de vida, inscripciones de nacimiento e inscripciones de defunción, además de certificados acreditando documentalmente su urgencia… pero quedan excluidos los expedientes matrimoniales.

Las bodas que ya estaban previstas sí se van a celebrar, pero las futuras bodas quedan en el aire ya que los novios no pueden iniciar un expediente matrimonial, una situación que está provocando que se vaya al traste los planes de muchas parejas que querían casarse en una fecha determinada y ahora no saben cuándo podrán celebrar su boda.

“Vienes con toda la ilusión y te marchas con incertidumbre y decepción porque una boda es importante y muchas cosas dependen de la fecha”, lamentan unos novios en declaraciones a Levante-EMV tras acudir al registro civil y comprobar que no pueden iniciar su expediente matrimonial para casarse en septiembre como habían previsto. Cosas del efecto mariposa: los problemas de la ministra de Justicia que acaban dejando sin bodas a los valencianos.

Consecuencias de la huelga

Según los cálculos de las asociaciones convocantes, ha supuesto la suspensión de 210.000 vistas y juicios y el bloqueo de 4.000 millones de euros. El portavoz del comité Juan José Yáñez ha asegurado que están "dispuestos a hablar el tiempo que sea necesario" con el ministerio de Justicia que dirige Pilar Llop. "Toda la tarde, toda la noche. Lo hemos demostrado. Todo el fin de semana si es necesario", ha apuntado para luego añadir que no son "radicales" y que están "dispuestos a buscar alternativas".

"Estamos de huelga porque nos han engañado, por lo menos tres veces. La primera vez en 2009, cuando se nos dijo que íbamos a asumir muchas funciones y que se nos pagaría esa responsabilidad. Las funciones llegaron y se ampliaron y llegaron otras. Lo que no llegaba era el momento de la adecuación. Seguíamos igual. Nadie tenía la intención de adecuarnos", ha relatado Yáñez.